Un joven de 26 años se desvaneció ayer a la noche en un gimnasio de Recoleta en medio de una sesión de CrossFit como consecuencia de un paro cardíaco. Fue trasladado rápidamente al Hospital Fernández, donde trataron de reanimarlo sin éxito, y falleció.
Manuel Ignacio López Pujato, oriundo de Santa Fe, se encontraba en medio de su clase de CrossFit cuando se desmayó en el centro deportivo Bigg CrossFit de Recoleta. Se trata de una técnica de entrenamiento militar de alto rendimiento que desde este año hace furor en Buenos Aires. Como consecuencia del accidente, el centro informó a través de su página de Facebook que permanecerá cerrado toda la jornada de hoy.
Por el momento, no trascendieron muchos detalles del incidente, que abrió un debate sobre la necesidad de establecer controles más exigentes a la hora de practicar actividades de esta índole y sobre la seguridad de la técnica en sí misma.
Esta técnica de entrenamiento se basa en el trabajo de diferentes capacidades y habilidades como la resistencia cardiovascular, respiratoria y muscular, fuerza, flexibilidad, potencia, velocidad, agilidad, psicomotricidad, equilibrio, y precisión. Los ejercicios que se ejecutan en CrossFit se diseñaron para hacerse con moderación, pero si se empujan los límites hasta el extremo se puede llegar a un exceso de fatiga perjudicial para el organismo.
El CrossFit apareció oficialmente en 2001 de la mano del estadounidense Greg Glassman, quien empezó a usar la técnica para entrenar a policías del estado de California. Gracias a los buenos resultados cosechados se usó también para el entrenamiento de bomberos, marines y militares. Al cabo de un tiempo se popularizó y masfició, por lo que en la actualidad se practica en muchos países. Llegó a la Argentina hace tres años y desde inicios de 2014 hace furor en la mayoría de gimnasios locales.