Con sus casas imponentes pintadas en tonos pastel, sus cuidados jardines y sus prolijas callecitas, Manzanares bien podría ser un típico barrio cerrado de las afueras de Capital Federal. Sin embargo es el escenario donde transcurre la versión local de la serie Amas de casa desesperadas, que si bien sigue al pie de la letra los lineamientos de la versión norteamericana, tiene ciertos rasgos que identifican al “mundo country” local.
“Es erróneo generalizar, pero podríamos decir que en Amas de casa... se pueden distinguir ciertas características representativas de este tipo de comunidades cerradas. Una de ellas es la obsesión por el vivir para el afuera. Todas las protagonistas se preocupan por tener la casa que hay que tener, mandar a los chicos a la escuela establecida. Viven en una situación un tanto hipócrita en la que muestran lo que se debe mostrar y padecen sus miserias puertas adentro”, analiza Marcos Carnevale, guionista y director local de la serie, quien confiesa que tomó algunos rasgos de los barrios semicerrados de Argentina a la hora de adaptar la exitosa serie norteamericana.
Si bien la ficción está centrada en la vida de cuatro mujeres, la serie también refleja cómo en ese ámbito de privilegio en el que viven hay ciertas pautas que cumplir. “Vera Sherer, el personaje de Carola Reyna, es el que más fuerte y explícitamente marca los códigos que determinan qué cosas es correcto hacer y qué no. En cambio Gabriela Solís, interpretada por Araceli Gonzalez, representa a la nueva rica, que gracias a su poder adquisitivo se filtra en ese mundo de privilegio. Aunque a veces le hacen sentir que no es una de ellas”, agrega Carnevale. “Muchas personas aseguran que deciden irse a vivir a un country o barrio cerrado por una cuestión de seguridad.
Pero a veces siento que más allá de protegerse de la delincuencia, lo que muchos necesitan es la seguridad de pertenecer, de ser aceptado. Algo de eso les sucede a las mujeres de esta serie. Aunque son amigas, no se cuentan todo. Están solas para afrontar sus miserias. En el fondo ellas están desesperadas porque sólo buscan que las quieran”.