Un niño de dos años y ocho meses se tragó una pila plana del tamaño de una moneda en la provincia de Misiones y quedó internado en terapia intensiva, luego de que la oxidación de la misma le quemara el esófago, por lo que, por estas horas, enfrenta complicaciones médicas severas en el Hospital de Clínicas de Asunción.
El niño llamado Daniel Santiago se encuentra luchando por su vida en la localidad de Asunción, Paraguay tras la ingesta del objeto y la perforación auto infligida del tubo muscular, como consecuencia del retiro abrupto de una sonda durante el transcurso de la sedación.
La extirpación del elemento tóxico se convirtió en una intervención compleja para el cuerpo de doctores, luego de la calcinación de la vía respiratoria del paciente que agravó seriamente su cuadro de salud.
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En la noche del último sábado la desesperación de su madre, Sara Benítez se acrecentó debido a que mientras los profesionales se encontraban realizando una tomografía computarizada su hijo sufrió un paro cardíaco de dos minutos.
La mujer contó que “los médicos lograron reanimarlo. Gracias a dios lo estabilizaron. Le colocaron dos drenajes de aire que ayudaron a estabilizar sus signos vitales, pero ahora se encuentra en un estado muy grave”.
El entorno familiar de Daniel Santiago acudió al pedido de ayuda económica por parte de la ciudadanía, para poder costear las medicaciones necesarias para su tratamiento, ya que sus costos son elevados y algunos de ellos no se encuentran disponibles en el centro de salud en el que se encuentra hospitalizado.
“Somos una familia creyente y en estos momentos sólo pedimos que oren por mi niño. Es doloroso verlo en esta situación, rodeado de tubos y sondas”, declaró conmovida Sara Benítez.
PM CP
