Alejandro Fabbri confiesa estar siempre del lado del más débil y, aunque le dedicó gran parte de su vida al análisis del fútbol, no se considera “un enfermito del fútbol”. Periodista, escritor, docente, hincha de Platense, fue invitado a participar al Ciclo de Entrevistas de la Escuela de Comunicación de Editorial Perfil. “Hace rato que perdí el fanatismo por el fútbol, ni siquiera sufrí mucho el ascenso de Platense”, aseguro.
-¿Su pérdida de interés tiene que ver con haber trabajado profesionalmente en el ámbito del fútbol durante tanto tiempo?
-Nunca fui un enfermito del fútbol. Iba a la cancha con mi viejo de chico desde los 7 años, hasta los 23 seguí yendo con él. Después, él se enfermó y yo me recibí de Periodista, y este año cumplo 40 años de profesional. En ese entonces iba mucho menos a la cancha y tuve un periodo largo que iba muy poco porque cuando jugaba Platense yo estaba cubriendo otro partido. Nunca oculté de que cuadro soy porque me parece una estupidez los que hacen eso.
-¿Qué le parece Sampaoli y los 23 jugadores seleccionados?
-Lo desafortunado de la lesión de Lanzini le permitió equilibrar la lista. Faltaba un mediocampista que no fuera uno de estos chicos que tocan bien, sino alguien de más experiencia para acompañar a Mascherano y a Biglia. Además, Enzo Pérez puede llegar al área contraria. Me hubiera gustado que le tocara a Lautaro Martínez para que alguna vez un pibe surgido acá llegue, pero no es el fin del mundo. Yo creo que no es un súper técnico, no es Bielsa, pero todos los equipos que Sampaoli dirigió, mejoraron. Bielsa le sacó el balde a Alexis Sánchez, Sampaoli capaz que termina sacándole el balde de la cabeza a Pavón. En un mundo normal jamás podríamos salir campeones.
-Está muy extendida la visión esa de que el periodista deportivo no puede revelar de qué cuadro son. ¿Usted qué opina?
- En este país donde desaparecieron más de 150 periodistas por cuestiones políticas, tener miedo de decir de qué cuadro uno es hincha es una estupidez total. Ser fanático es otro problema.
-¿Cuál es su opinión de la finalización de Fútbol Para Todos? ¿Podría haber haber continuado?
-Que termine era obvio, a pesar de la promesa del Presidente de mantener Fútbol Para Todos hasta 2019. Es lamentable que la empresa que gane los derechos para transmitir tenga su máximo dirigente detenido. Esta empresa quedaría invalidada en otro país. Por otro lado podría haber continuado con sistema mixto, una cosa intermedia o más barato, pero pasa el tiempo y te das cuenta cual es el objetivo final. Este gobierno tiene la mentalidad de Martínez de Hoz: el mercado interno para ellos es no existe.
-¿Qué le parece la decisión de suspender el partido de Argentina e Israel?
-Estoy de acuerdo. Tengo amigos que viven en Israel desde hace muchos años y ellos están en contra del gobierno actual, que además está boicoteando todos los acuerdos que se han hecho. Siguen estableciendo colonos donde deberían estar los palestinos. El partido se iba a jugar en Tel Aviv. El gobierno de Israel quiso llevar a Messi para que pareciera que estaba de acuerdo con el hecho de que Jerusalén fuera la capital de Israel. Desde ese lugar reaccionaron tarde los dirigentes argentinos, pero evidentemente fue porque los jugadores se asustaron un poco. Ojalá que Israel pueda jugar en otro lugar con Argentina, porque no hay nada contra el pueblo israelí.
-¿Los barras siempre estarán respaldados por la dirigencia?
-Violentos hubo siempre, este es un país donde hay barras o mafias en todos los lugares. Hay clubes donde las barras desaparecen por un tiempo, después vuelven, porque hay plata. La peor barra del fútbol argentino es la de Boca, que cuenta con el aval de los dirigentes. Pensemos que los cargos más importantes de AFA son todos de Boca, desde el presidente de la Nación que fue presidente de Boca, pasando por Tapia (Claudio, presidente de la Asociación de Fútbol Argentino), Angelici (Daniel, vicepresidente), Mitjans (Fernando, presidente del Tribunal de de Disciplina), Raúl Omar Plee, (presidente de ética); Latorraga, (Hector Luis, presidente de Tribunal de Apelaciones y el presidente de la Comisión Electoral). Son todos de Boca, esto nunca pasó ni con Grondona, que con todo su autoritarismo tenía la prudencia de poner gente de diferentes clubes en diferentes lugares. Con Grondona, ascendieron y descendieron casi todos. Hoy quieren hacer futbol con dos equipos, pero en Argentina la mitad no somos ni de Boca ni de River.
(Alumnos de Primer Año de Periodismo - Escuela de Comunicación de Editorial Perfil)
Adriana Vanoli - Gustavo Duarte - Lucía Ciuffradi
