Delfina Rossi participó de una conferencia de prensa organizada por estudiantes de Periodismo de la Escuela de Comunicación del Grupo Perfil, en la que se refirió al reciente acuerdo de precios y las dificultades que enfrenta. “Esperemos que funcione. Es un esfuerzo que se le está pidiendo a un sector determinado hasta el 7 de enero, que luego se ve beneficiado por determinadas políticas del Gobierno. Necesitamos que funcione”, sostuvo.
La directora del Banco Ciudad mostró coincidencia en la gestión del PRO en la Ciudad de Buenos Aires y marcó diferencias con la agenda libertaria. “Horacio Rodríguez Larreta tiene una agenda que es propositiva y que no es Antipolítica como la de Javier Milei. Políticas como la de Milei no le favorece en nada a la democracia de nuestro país”, aseguró Rossi en el Ciclo de Entrevistas a cargo de Rodrigo Lloret, director de Perfil Educación.
—¿Cuál es la responsabilidad del Gobierno en relación a los altos índices de inflación?
—No quiero caer en el “Ah, pero Macri”, pero, en el gobierno anterior ya teníamos niveles de inflación elevados. Eso dio un salto importante por las dos megas devaluaciones, la irresponsable toma de deuda y sobre todo la desregulación del mercado de capitales. Entonces, teníamos una inflación con el gobierno de Cristina Kirchner del 20%, con salarios que los últimos tiempos acompañaban. Pero, en el gobierno de Mauricio Macri se aceleró la inflación, perdieron poder adquisitivo los salarios y se perdieron puestos de trabajo en el sector privado. Luego vino la pandemia y todo el mundo se cayó en términos económicos. Me parece que la inflación está buscando el ancla nominal, lo busca con el dólar, lo busca con el congelamiento de tarifas. Las señales de tranquilidad, que no se van a devaluar y que se está buscando estabilidad cambiaria, están presentes en el Gobierno. También, creo que hay factores y tensiones en este juego, está costando muchísimo sentar ese consenso sobre una mesa que realmente las necesitamos.
—Los acuerdos de precios no han funcionado en otros momentos históricos, ¿por qué podría funcionar ahora?
—Esperemos que funcione. Es un esfuerzo que se le está pidiendo a un sector determinado hasta el 7 de enero, que luego se ve beneficiado por determinadas políticas del Gobierno. Necesitamos que funcione. Es un país que tiene una estructura productiva compleja pero también tiene muchas riquezas. No tiene soberanía monetaria, pero que sabe cómo gestionar el control de cambio.
—Algunos representantes del Frente de Todos sostienen que los militantes deberían verificar que los precios no aumenten. ¿Usted qué piensa?
—El poder de los consumidores es buscar alternativas, creo que tenemos muchas cooperativas de trabajo, creo que la Uniones de Trabajadores de las Tierras ha sido un ejemplo. Creo mucho en la organización popular y en compra mayorista y redistribución.
—Desde las cámaras de empresarios hablaron de un posible desabastecimiento. ¿Hay especulación con la remarcación de precios?
—Lo fundamental para que los precios estén estables en nuestro país es que no hayan especulaciones y, como el valor del dólar es el valor de referencia, todos tienden a remarcar. El control de tipo de cambio es una herramienta central para la estabilidad de precios, y es una necesidad imperiosa de nuestro país. Creo que el Gobierno ha sido exitoso en dar esa estabilidad, pero creo que las debilidades propias de una macroeconomía mal gestionada nos hacen tener tareas pendientes. En este marco que tenemos estabilidad cambiaria, pero que todavía no tenemos el acuerdo con FMI, los mecanismos de control de precios son atajos necesarios en este contexto de vulnerabilidad para proteger el bolsillo de las mayorías.
—Pareciera que Martin Guzmán está concentrado en la negociación con el FMI. ¿Quién toma las decisiones en el Ministerio de Economía sobre la política de control de precios?
—No formo parte del Ejecutivo, solo puedo dar visión desde afuera. Se mantiene un equipo económico, una coordinación entre actores claves: como es el Banco Central, el Ministerio de Producción, el Ministerio de Economía. El nuevo jefe de Gabinete tiene una agenda económica clave y que se consensa de los pasos a dar también con el Poder Legislativo Nacional.
—En el acto del 17 de octubre en Plaza de Mayo algunos oradores plantearon la posibilidad de evitar un acuerdo con el FMI. ¿Es posible plantear un no pago al FMI?
—El Frente de Todos adquirió el contrato ya realizado con el Fondo Monetario Internacional por más de 54 millones de dólares, es un monto excesivamente alto que tenía un programa de repago muy corto. Nosotros tendríamos que estar pagándolo mayoritariamente estos años. La pandemia le dio un respiro al mundo en esos términos, porque el Fondo Monetario Internacional tomó una actitud en ese sentido: o se caía Wall Street o ellos esperaban un poco. La realidad es que vivimos una crisis financiera internacional también con el Covid, pero la cuestión es que una economía emergente como la de Argentina, dentro del capitalismo financiero internacional, requiere de un acuerdo, porque básicamente lo que estamos viendo en estos meses es la necesidad de dólares. Eso es en parte lo que produce el conflicto inflacionario que es quizás los titulares que vemos hoy en todos los portales. Así que, tarde o temprano, se va a tener que llegar a un acuerdo, que esperemos que sea beneficioso y seguramente lo será para la Argentina. Eso quiere decir que tiene que permitirle crecer a la Argentina y generar ocupación por sobre todo para que sea sustentable efectivamente el repago de la deuda.
—El FMI tiene un máximo de diez años de pago pero en Gobierno se pide ampliarlo. ¿Usted qué piensa?
—El Fondo Monetario Internacional tiene un programa para pagar la deuda que tomó la gestión de Macri en un plazo de diez años. Eso no quiere decir que sea la una única renegociación. Me parece que en lo que vamos a entrar, no es un escenario de mi preferencia y si no hubiese pasado el gobierno de Mauricio Macri creo que no tendríamos que estar en este escenario. El préstamo que nos dejó Macri con el Fondo Monetario Internacional es una situación que nos está saliendo muy caro. Me parece que el plazo sobre lo que se va a poder pactar efectivamente va a ser de diez años. Eso va a tener que significar un nuevo diálogo con el FMI para que se vuelva a renegociar y reestructurar. El desafío del Frente de Todos, de la dirigencia, de la oposición y de todos los que queremos poner a esta Argentina de pie, es saber que esto es una traba para nuestro desarrollo. Por lo que hay que ir destejiéndola de a apoco, para que en el mientras tanto, se genere la menor cantidad de pobreza, de pérdida de empleo y pongamos a la Argentina en la senda del crecimiento.
—¿Cuál es el análisis que hace de la derrota del oficialismo en las PASO?
—La historia nos muestra que el peronismo y el campo nacional y popular se une con una estrategia defensiva, en este caso antimacrista. Me parece que la sociedad lo que nos demuestra en las últimas elecciones de las PASO y esperemos que se revierta la tendencia en las elecciones generales, es el mensaje con el cual yo trabajo, me quedo y milito: con el antimacrismo no alcanza. Lo que nosotros tenemos que construir es una propuesta propositiva, ofensiva, que sepamos explicar mejor a qué país queremos llegar. Me parece que la sociedad nos pide que expliquemos, cómo vamos a llegar a estos acuerdos con la oposición y creo que es un gran desafío. Debemos tener la envergadura política que esté a la altura de las circunstancias.
—En junio publicó un tuit, que luego borró, que se refería a Axel Kicillof y decía: “Cuando gobernás una provincia pero conducís un país”. ¿Quién gobierna la Argentina, Alberto Fernández o Cristina Kirchner?
—Alberto.
—Si tuviera que optar entre Horacio Rodríguez Larreta y Javier Melei, ¿a quién elegiría?
—Horacio Rodríguez Larreta tiene una agenda propositiva y que no es antipolítica como la de Milei. Políticas como la de Javier Milei no le favorecen en nada a la democracia de nuestro país.
—¿Coincide con la agenda de Rodríguez Larreta?
—Me parece que tiene una agenda positiva, en el sentido que tiene propuestas y que no necesariamente comparto. Porque la agenda de ellos es hacer una reforma laboral para generar trabajo. En cambio, nosotros que estamos diciendo es que esta reforma laboral que proponen tiende a quitar derechos. Me parece que es una contradicción válida y me parece que tiene que estar esa discusión. Pero en el espacio Rodríguez Larreta no te dicen esto es así porque yo quiero y ya está. Creo que hay una genuina discusión.
—Agradecemos su participación en el Ciclo de Entrevistas de Perfil Educación y la invitamos a realizar un comentario final para cerrar el reportaje.
—Creo que así como el desafío de la clase de dirigente del país es estar a la altura y buscar respuestas. También lo tienen las nuevas generaciones de periodista en este país. Para salir de lo rápido, de lo barato, de lo instantáneo y aportar a este periodismo que a veces se lo llama Corea del Centro pero yo creo que es el que aporta un debate que esté a la altura.
Por Paola Ramirez Ledesma, Gabriela Maidana y Mariana Ríos
Estudiantes de Periodismo de Perfil Educación en la Escuela de Comunicación