Luis Rivera López: "Calderón de la Barca anticipó el multiverso de Marvel"

"Para mí La Vida es Sueño, de Calderón de la Barca, es una especie de joya en el alhajero del siglo de oro español y de Calderón fundamentalmente, porque encara una temática que es muchísimo más trascendente e universal porque se mete con una cantidad de temas que, con el correr de los siglos, se han transformado en fundamentales para la vida del ser humano -explica Luis Rivera López al hablar de la versión de este texto con el unipersonal Segismundo-. El sueño como la vida paralela, el sueño como deseo, tal como dijo Freud muchos años después. También como imagen vívida de ese deseo y el sueño como fantasía sobre aquello que queremos y que a veces no logramos, aunque lo alcanzamos en ese otro universo. Como diría ahora el cine de Marvel, en ese multiverso que es la posibilidad de entrar y salir, porque el inconsciente es inabarcable y a veces inmanejable. Ese mundo que imaginó Calderón a través del simple enfrentamiento generacional es el punto de partida que tiene el personaje para elaborar su tesis filosófica, por decirlo de alguna manera, es algo que siempre me pareció de una realidad cotidiana palpable. Me pareció muy visionario y más allá de contener algunos de los versos más famosos y mejor escritos de la literatura española, se trata de una historia particularmente rica".

En esta puesta de Libertablas que sube a escena los domingos a las 19 en el Centro Cultural de la Cooperación (Av. Corrientes 1543, CABA), con el protagonismo de Rivera López, quien trabaja con su coequiper Gustavo Manzanal en la dirección. Aquí recurrieron a muñecos, objetos, una escenografía estilizada, transiciones abruptas, música integrada al desarrollo narrativo y así lo explica: 

Como dice Manzanal, "Cuando un director tiene un gran elenco y muchas alternativas se convierte en un goleador de tantos lenguajes que conviven. Cuando dirige un unipersonal, se convierte en un arquero que ataja todas las posibilidades: tiene tanto al actor como eje fundamental como el espacio y los objetos de que se rodea". Dueños de una gran tradición en acercarle obras clásicas a público infantil, aquí se enfocaron en los adultos aunque sin concentrarlo exclusivamente en la edad de los espectadores: "Hemos hecho muchísimos espectáculos dirigidos a la infancias. La ventaja de hacer uno más general es que uno trabaja con mayor libertad, simplemente decís lo que querés decir, haya títeres o no -revela Rivera López-. Uno se siente más libre de armar una creatividad sin tapujos, es la ventaja de tener un público completamente amplio". Y Manzanal completa: "La repsuesta es fabulosa. Produce un gran entusiasmo lo que ocurre sobre el escenario. Han sido fabulosos con Segimundo".
Esta propuesta tiene música original de Alberto Chucho Bonacera; diseño de escenografía, vestuario y títeres de Alejandro Mateo; realización de escenografía y títeres de Andrés Manzoco, Luis Rivera López y Melina Filossi; y realización de vestuario de Titi Suárez. Encontrá acá más info sobre las entradas..