La legisladora Liliana Montero, que ejerce su profesión de psicóloga desde hace 25 años, presenta mañana su libro sobre la salud mental.
PRESENTACION. Mañana a las 19:30 en la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la UNC |
Cedoc Perfil
Un estado de locura es el título que comprime en 158 páginas las experiencias personales y profesionales de la legisladora provincial Liliana Montero a lo largo de los últimos años, en su recorrido por el sistema de Salud Mental en Córdoba.
Editado por Raíz de Dos, tiene a la periodista Natalia Ferreyra como colaboradora a la hora de enhebrar en palabras y relatos las vivencias de Montero.
Desde hace 25 años, la autora ejerce su profesión de psicóloga tras formarse en la Universidad Nacional de Córdoba. La publicación compatibiliza dos aspectos de su compromiso: el de velar por los derechos en los hospitales que integran el sistema de salud mental y su militancia política. Ella misma explica que hay un corte temporal en el relato: el año 2015.
Desde el 2012 recorre dos veces por año todos los hospitales monovalentes de capital y el interior. “Eso me permitió ver en una línea de tiempo cómo se desempeñan”, subraya y aclara que en todas las oportunidades fueron visitas sorpresivas, “para evitar que preparen un tour y observar la situación real”.
Habla con los equipos, recorre las salas, dialoga con los pacientes y al final de la jornada escuchar a los directivos de cada institución. En relación a esto, reivindica a Amadeo Sabattini, exgobernador de Córdoba y médico de profesión. “Se paraba en la cola de los hospitales para ver cómo funcionaban”, rememora a modo de ejemplo.
Poner el cuerpo. “Tengo registros corporales de algunos momentos vividos en los hospitales”, expresa con estremecimiento a partir de lo que fue encontrando en sus visitas. “Registros primarios, como por ejemplo ganas de vomitar, situaciones inmanejables que se despertaban y que me obligaban a hacer una pausa para recuperarme”. “Por eso el título del libro: qué hace el Estado con la locura.
No quise plantear algo teórico para el mundo psy, para colegas o especialistas en la materia. Procuré una mirada de la psicología que se entrecruce con mi responsabilidad política”, aclara. “Los manicomios son el lugar de los locos pobres ”, apunta. Y describe cuáles son las tres vulneraciones que asaltan los sentidos. Los pacientes con padecimientos psiquiátricos “son sujetos despojados de derechos; la locura asusta y la pobreza” en la que están inmersos. Y agrega: “El estado las incrementa sometiéndolos a situaciones de indignidad”.
Un estado de locura es un relato crudo que trasunta bronca e impotencia; pero trasciende en el compromiso de trabajar para que se reconozcan a los pacientes como sujetos con derechos que deben ser reconocidos.
