El presidente Alberto Fernández visitó este viernes el primer reactor nuclear de potencia íntegramente diseñado y construido en Argentina. La visita del mandatario a las instalaciones del CAREM, en la localidad bonaerense de Lima, contó con la presencia del ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, y la presidenta de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), Adriana Serquis.
La delegación que acompañó al jefe de Estado estuvo integrada por el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello; la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti; el secretario de Planeamiento y Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación, Diego Hurtado; la subsecretaria de Coordinación Institucional de Energía, María Florencia Álvarez Travieso; y el presidente de Nucleoeléctrica Argentina, José Luis Antúnez, según indicaron voceros oficiales a la agencia de noticias Télam.
El CAREM es el primer reactor nuclear de potencia íntegramente diseñado y construido en la Argentina, que reafirma con este nuevo hito su capacidad para el desarrollo y puesta en marcha de centrales nucleares, perfilándose a su vez como uno de los líderes mundiales en el segmento de reactores modulares de baja y media potencia (SMR, por sus siglas en inglés).
Desde el Ejecutivo, explicaron que el nuevo desarrollo de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) coloca al país "en el camino de liderar el segmento de reactores modulares de baja y media potencia SMR, que son la tendencia mundial en materia de energía nuclear, porque se trata de reactores mucho más pequeños, con un diseño más simple y seguro", según reprodujo Télam.
Esta clase de reactores tiene una gran proyección para el abastecimiento eléctrico de zonas alejadas de los grandes centros urbanos o de polos fabriles e industriales con alto consumo de energía (incluyendo la capacidad de alimentar plantas de desalinización de agua de mar).
El reactor será capaz de generar 32 megavatios eléctricos y será utilizado para abastecer de electricidad a unos 120 mil habitantes. Asimismo, se destaca por un riguroso estándar de seguridad establecido desde el diseño, gracias a la aplicación de soluciones de alta ingeniería que simplifican su construcción, operación y mantenimiento.
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