Los fiscales pidieron investigar por presunto falso testimonio a Juan Guarino y a Tomás Collazo, dos amigos del grupo de los acusados por el asesinato de Fernando Báez Sosa, que por distintos motivos quedaronn al margen de la acusación.
Así lo solicitó la Fiscalía ante el Tribunal Oral Criminal 1 de Dolores en su alegato, en el que pidió que los ocho acusados sean condenados a la pena de prisión perpetua. Respecto de Guarino y Colazzo, los fiscales sembraron dudas por su declaración como testigos, ya que omitieron brindar detalles sobre lo qué pasó estando ambos en el lugar de los hechos.
Juan Guarino, quien fue sobreseído en la causa por el homicidio, declaró como testigo y dijo que vio una pelea, pero que se fue del lugar sin precisar detalles y aseguró que no pudo ver nada de la golpiza que le dieron a Fernando.
Además, en todo momento sostuvo que los rugbiers eran recurrentes en generar peleas y que "estaba cansado" de que eso ocurriera.
Por su parte, Tomás Collazo, quien también estuvo a metros de donde los acusados golpearon a Fernando, nunca estuvo imputado. Señalado como "el sospechoso 11", la teoría en su caso es que omitió dar detalles sobre lo qué pasó en el lugar y luego de los hechos, como así también de la conversación que tuvo con los implicados.
Tras un análisis de las cámaras de seguridad de la zona y de testimonios, se confirmó que Collazo salió del boliche once minutos después que el resto de los imputados, por lo que, para la fiscalía, no estuvo involucrado en el hecho.
“Solo observa todo lo sucedido (el cual no resulta imputado en autos, ni ha sido identificado durante la investigación como agresor)”, describió la fiscalía sobre su actuación en el hecho.
En ese entonces, el joven tenía 17 años y nunca fue reconocido ni por testigos, amigos ni cámaras de seguridad como un participante más del crimen, pero sí se lo observó frente al boliche Le Brique.
El alegato de Fernando Burlando: "Todos asesinaron a Fernando"
El abogado Fernando Burlando afirmó que "todos" participaron del homicidio ocurrido el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell y pidió la prisión perpetua para los acusados.
"Todos, absolutamente todos, participaron. Todos asesinaron a Fernando Báez Sosa", dijo el abogado. "Nuestro reclamo de justicia, ante lo que llamamos el suplicio de Fernando, es la responsabilidad de quienes fueron sus ocho asesinos, se resume en dos momentos de salvajismo y de horror", agregó
Por otro lado, también habló de una “zona liberada” frente al local Le Brique y dijo que fue una “voraz carnicería” que llevó a cabo el grupo de acusados con "la intención" de cometer el homicidio del joven estudiante de abogacía, previo a un supuesto "trabajo de inteligencia".
AG / MCP