En largo diálogo con Marcelo Bonelli en Radio Mitre, el presidente Alberto Fernández dejó este sábado 4 de abril varias frases importantes respecto a los desafíos que plantea el coronavirus, destacando que "la cuarentena se termina el 12, pero hay que ver cómo seguimos, esto es día a día... Lo que se habló no es de levantarla, sino de ir viendo cómo se puede ir flexibilizando algunas actividades, por eso lo que analizamos ayer con la CGT, la Cámara de Comercio y la UIA es la formación de una comisión que vea lo mejor para ir haciendo cuando llegue el 12, que se podría ir retomando con el menor riesgo".
"Pensar en que todo se puede normalizar de un día para otro no tiene sentido. Imagínense que los infectólogos nos dicen que en la primera quincena de mayo tendríamos el pico de contagios en la Argentina", dijo el Mandatario, que lamentó los graves sucesos que enmarcaron el pago a jubilados en los bancos este viernes 3 de abril, y aunque admitió que estaba "molesto y enojado por lo ocurrido", descartó renuncias, elogió a su equipo señalando que "trabajan de 7 de la mañana a 12 de la noche" y enfatizó que le dio precisas instrucciones al titular del Banco Central Miguel Pesce para que los bancos de todo el país avancen con el otorgamiento de créditos a las empresas, "porque de eso depende que puedan sostenerse y pagar los sueldos".
Fernández reconoció esta mañana que "la explosión del viernes en los bancos puso en peligro todo el esfuerzo" que la Argentina viene haciendo por la pandemia del coronavirus, destacando que "hoy parece que está más ordenado". "Mandamos a su casa a lo que no les toca cobrar", dijo el Presidente, que de manera implícita adjudicó buena parte de la responsabilidad de lo ocurrido en los bancos a "mucha gente mayor que tiene la costumbre de ir a cobrar, le gusta verle la cara al cajero, llevarse la plata en el bolsillo, y ayer fueron todos, incluso los que no tenían que ir...".
En ese cuadro, admitió que "evidentemente alguien hizo mal las cosas, claro que eso me molestó" pero dio un claro respaldo a sus funcionarios más cuestionados, señalando que "acá nadie está pensando en renuncias, mis funcionarios trabajan de 7 a de la mañana y a veces los llamo a las 12 de la noche y siguen trabajando", para seguir con la "rebaja de sueldos que se les pide es un acto demagógico, porque todos mis funcionarios no son ricos, no tienen empresas, acá no hay sueldos secretos, mis funcionarios viven de sus sueldos y yo no tomo dos meses de vacaciones, después nos dicen populistas a nosotros", señaló, mostrando su fastidio con los reclamos que se hicieron vía cacerolazos y declaraciones opositoras sobre el tema.
"El fútbol está entre todo lo que habrá que analizar, tal vez sin público podría volver, pero no en mayo...", dijo el Presidente
"Lo que si lamenté al ver todo lo que pasaba es me dije 'Pucha, todo este esfuerzo en un día lo ponemos en peligro'", agregó sobre los bancos. "Fue un episodio y creo que eso hoy no va a pasar", confió el Mandatario. Al analizar que fue "un conjunto de factores" lo que provocó la multitud en las entidades financieras, apuntando también a la difusión que el Gobierno le dio al tema priorizando a los diarios: "Creo que también pasó que todo esto se difundió vía gráfica y los diarios están vendiendo muy poco".
"Hubo un acto de confianza porque todos creemos que todos entendemos de qué se trata la cuarentena y no es así, hay mucha gente que no lo entiende, que se molesta, que se enoja con estas situaciones...", apuntó Alberto Fernández, quien subrayó que "la improvisación fue no haber tenido en cuenta que esa gente existe".
“Necesito que todos entiendan que no tenemos que relajarnos. Tiene un contagio de una velocidad asombrosa. Cuando vi lo que había pasado, dije pero pucha todo este esfuerzo lo ponemos en peligro", remarcó Fernández, enfartizando que "lo que es importante es que todos tengamos en cuanta la importancia de la cuarentena. Yo elegí el caso español porque somo genéticamente muy parecidos, los conglomerados humanos son parecidos a los nuestros. Por qué tenemos que seguir con la cuarentena. Nosotros el 6 de marzo, España tenía 380 casos. El día que se manifiesta la pandemia en Argentina, teníamos 2 casos. España no tenía cuarentena y nosotros sí. La gente que se infecta tiene síntomas a los 6 días, aproximadamente. El virus vive en el cuerpo entre 11 y 15 días. La mayoría se cura. El virus en mucha gente no se manifiesta, contagiados asintomáticos, vive entre 11 y 14 días, si esa gente se queda en su casa no contagia. Cuando terminamos la cuarentena habremos logrado que el virus…"
Sobre el tema educativo, diferenció a la UBA de las escuelas primerias y secundarias: “a la UBA va gente grande que se expone mucho, es distinto a las escuelas, hay mucha gente mayor, no solo profesores, también alumnos. Ya dije que no le va a cambiar la vida a nadie si un chico termina la primaria o secundaria tres meses después. Quiero hablar si no podemos dar las clases a distancia. La cuarentena nos garantiza que todo esto nos duela menos". Y valoró "la cantidad de tarea que les están dando a los chicos en sus casas, porque recibo muchos mensajes de padres que me dicen que están trabajdno tanto o más que cuando tenían clases en forma normal".
Respecto al transporte, descartó que luego del 12 pueda retornar el transporte de larga distancia de manera normal, indicando "si habilitamos los colectivos de larga distancia es como si viniera un vehículo del exterior. Uno puede infectar a todo el colectivo. Si liberamos eso el riesgo es muy grande. Hay que ser muy cuidadoso con los aviones, micros".
Las fronteras, anticipó, seguirán "abriéndose en forma puntual y con controles muy estrictos", al tiempo que volvióa califiicar a Brasil de "peligro exponencial. Brasil tiene fronteras con todo". Y criticó a Bolsonaro sin nombrarlo, señalando "si seguimos diciendo que Dios nos va a salvar del coronavirus , vamos muy mal".
Respecto al transporte, descartó que luego del 12 pueda retornar el transporte de larga distancia de manera normal, indicando "si habilitamos los colectivos de larga distancia es como si viniera un vehículo del exterior. Uno puede infectar a todo el colectivo. Si liberamos eso el riesgo es muy grande. Hay que ser muy cuidadoso con los aviones, micros"
Con los bancos, el Presidente fue especialmente duro: "Estuvieron cuatro años llenándose de plata"
En uno de los momentos más duros de la nota con Mitre, el Presidente apuntó al rol bancario en la crisis, precisando que "Estamos en un momento en el que todo debe flexibilizarse". "Espero que en esta instancia entiendan que deben prestarle dinero a empresas para que se mantengan en pie", apuntó y fustigó: "La dureza de algunos bancos a mí me cae mal en este momento. Me cae muy mal. Estuvieron cuatro años llenándose de plata con negocios tremendos que el Estado dejaba, estoy hablando de las Lebac y Leliq", dijo Fernández.
Con relación a la polémica generada en torno a la posibilidad de declarar de interés público todo recurso sanitario, el jefe de Estado criticó: "Como fue planteado, parecía que íbamos a expropiar las clínicas privadas y esa nunca fue la intención". De ese modo, explicó que la intención del Gobierno es que "queríamos que si el sistema público en algún momento necesita una cama con respirador y esa cama está vacía en un sanatorio privado, que se autorice a usarla". "Eso es todo", insistió y cuestionó que "en este país tremendista lo vendieron de otro modo".
También hizo referencia a los sectores más golpeados por la crisis del coronavirus, y resaltó: "Tenemos que resolver el tema de la hotelería y gastronomía, que son lugares en los que la posibilidad de infección, por la naturaleza del negocio, crece mucho". "El comercio es otro de los más lastimados por todo esto", analizó y estimó: "Tal vez, podemos resolverlo con el ´delivery ´, pero de todo el comercio. Si me quiero comprar una camisa, que me la manden a mi casa".
Sobre los argentinos en el exterior, les pidió paciencia, al indicar que abrir esos regresos en masa "puede hacer empezar todo de cero" y lo enmarcó "entre los dilemas que hay que enfrentar con esto, que es un problema desconocido y que no tiene soluciones, sólo podemos ir mirando lo que han hecho los otros países".
Finalmente sobre la propuesta que el Gobierno hará para la refinanciación de la deuda externa, Fernández aseguró "el plan de negociación con acreedores sigue en pie", insistiendo en que "haremos una propuesta sensata, como ya dijimos, será una propuesta que la Argentina pueda cumplir".
"A mí no me interesa que la Argentina entre en default, quisiera que no entre", pero subrayó: "Lo que hace falta es que todos entiendan la situación en la que vivimos".
HB