La princesa Alexia de Holanda, hija de Máxima Zorreguieta, participó de la “Semana Queer”, organizada por el UWC Atlantic College, el internado galés al que asiste y compartió en sus redes unas fotos que fueron tildadas de "salvajes". Este evento fue creado para visibilizar al colectivo LGTBIQ y la joven, como estudiante de la institución, formó parte de él.
Según publicó el medio español Vanitatis, en ese internado el 32% de los alumnos se siente parte de identidades de género que no responden al binomio hombre/mujer y el 12% siente dudas sobre su autopercepción. Ante estos datos, la “Semana Queer” cobra relevancia y durante siete días se organizan actos, desfiles y fiestas con la identidad de género como emblema.
Fue en medio de estos encuentros que la hija del medio de la reina Máxima eligió un vestuario llamativo y compartió fotos con sus amigas en las redes sociales. Estas imágenes fueron publicadas en el medio holandés Ditjes en Datjes y comenzó el escándalo. Por un lado, por el atuendo de la joven, y por otro, porque no se pueden difundir imágenes no autorizadas de la realeza.
Ante esta circunstancia se generó un debate sobre la difusión de las fotos, ya que, como fue Alexia misma fue quien las difundió, quedaría fuera de debate el tema de la privacidad. De todos modos, como se trata de una menor de edad (tiene 16 años) entran otras legislaciones en la discusión sobre circulación de fotos.
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Los reyes de Holanda hicieron un pacto con los medios, hace más de 20 años, que prohíbe que se publiquen imágenes no deseadas de la realeza. Este acuerdo que volvió a tomar visibilidad en los últimos días genera descontento entre algunos holandeses, ya que se ve como un acto de censura. En relación a este tema, el periodista y escritor Hans Jacobs escribió en su cuenta de Twitter: “Vivimos en Corea del Norte. Entre otras cosas no se permiten artículos o fotos en línea cuyo contenido no haya sido verificado primero por el Servicio de Información del Gobierno... No hay mayor tontería”.