El hotel Four Seasons solicitó la convocatoria de acreedores ante la Justicia como consecuencia del impacto de las restricciones al turismo internacional y los viajes de negocios. Luego de permanecer un año y medio cerrado reabrió sus puertas en julio pasado, con actividad acotada; actualmente su nivel de ocupación está en el orden del 2% de su capacidad.
El emblemático hotel cinco estrellas, construido en la década del noventa y ubicado en el barrio porteño de Retiro, comunicó que continuará en funcionamiento mientras avanza con la renegociación de las deudas acumuladas.
A través de su sociedad controlante Hotel Corporation Argentina, el Four Seasons garantizó la totalidad de los cerca de 300 puestos de trabajo y, a pesar de la poca ocupación y haber solicitado la convocatoria de acreedores, tiene planes para incorporar otros 100.
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Durante las restricciones la compañía recibió asistencia oficial a través del pago de salarios vía ATP y la reducción de aportes patronales. Sin embargo, el cierre del ingreso al país del turismo internacional y la veda a la realización de encuentros como seminarios y convenciones representó un impacto del que no se pudo recuperar.
En ese sentido, a pesar de la reapertura en la actualidad solamente están ocupadas 4 de las 176 habitaciones disponibles. La parcial reactivación del turismo interno no pudo ser aprovechada por este hotel ya que generalmente es receptor de clientes provenientes del exterior.
La situación no es exclusiva del Four Seasons, si se tiene en cuenta que el sector es uno de los más castigados por las restricciones impuestas al turismo local e internacional, que llevó al cierre de varios establecimientos en las principales ciudades del país.
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El hotel Four Seasons
El edificio fue construido en la década del ’90 por el magnate saudita Gaith Pharaon y por entonces pertenecía a la cadena Hyatt, pero en septiembre de 2001 pasó a manos de la cadena internacional Four Season, que lo opera desde entonces.
Presentado en su página web como un hotel de "elegancia europea con un toque exclusivamente argentino" el Four Seasons dispone de dos restaurantes de lujo (uno de ellos al aire libre y con hoyo para hogueras), un bar animado, spa, piscina cubierta climatizada, sauna y gimnasio.
El hotel fue adquirido a la cadena internacional por capitales árabes en 2009, que invirtieron desde entonces cerca de 150 millones de dólares: 65 millones en la compra de la propiedad, 75 millones en la reforma y 15 millones en los últimos 5 años.
MF / ED