En 1924, se llevó adelante en Chaco la Masacre de Napalpí, una de las grandes matanzas que se cometieron en la historia argentina contra miembros de las comunidades Qom y Moqoit, quienes 98 años después aún esperan que se realice un juicio para establecer la verdad histórica del hecho y que tendrán obtendrán el reconocimiento necesario tras casi un siglo.
El 19 de julio de ese año un grupo de labriegos, de su mayoría pertenecientes a pueblos originarios, realizaron una protesta por las condiciones de trabajo y los escasos salarios que recibían por realizar el levantamiento de la cosecha de algodón.
Cerca de 130 policías y civiles armados llegaron al lugar para intentar reprimir la protesta que se desarrollaba en Napalpí, una localidad chaqueña. En el enfrentamiento, se dispararon más de 5 mil balas, lo que dejó un saldo de 400 muertos, dentro de los que se encontraban hombres, mujeres, niños y ancianos.
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Las víctimas de la matanza contra los miembros de las comunidades Qom y Moqoit fueron mutiladas y enterradas en fosas comunes.
Sin embargo, la situación no terminó con el asesinato de los manifestantes, sino que la represión y persecución a los sobrevivientes e integrantes de estos pueblos originarios se prolongó por meses, según pudo reconstruir la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
Dentro de los sobrevivientes a la masacre, se encontraban 38 niños que fueron entregados como sirvientes a hacenderos locales, pero algunos murieron al poco tiempo por las malas condiciones de vida.
La Masacre de Napalpí tuvo lugar bajo la presidencia de Marcelo T. de Alvear y el, en ese entonces, gobernador de Chaco, Fernando Centeno. En esa línea, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación emprendió una investigación por el encubrimiento de la masacre y la negación por parte del Estado.
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El Juicio por la Verdad de la Masacre de Napalpí
A pesar de que el paso del tiempo no permite condenar a los principales responsables por matanza, el juicio se realizará el 19 de abril y permitirá esclarecer la verdad en cómo se llevaron adelante semejantes actos y reconocerá como víctima a la única sobreviviente de la Masacre de Napalpí, Rosa Grilo, una mujer de 114 años de edad.
El Juicio por la Verdad tiene como objetivo hacer valer el derecho de las víctimas a conocer la verdad sobre los hechos ocurridos en relación con los crímenes de lesa humanidad.
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Además, en la audiencia, se exhibirán videos de los relatos de vida de otros damnificados, así como también de sus descendientes. En ese sentido, participarán historiadores y representantes de las comunidades Qom y Moqoit.
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