La Iglesia de Salta volvió a tomar una decisión polémica: el miércoles oficializó la creación del “Ministerio del Exorcista” para liberar a las personas de "manifestaciones del Demonio".
El arzobispo local Mario Antonio Cargnello, denunciado por monjas carmelitas por violencia de género, designó a los sacerdotes Loyola Pinto y de Sancristóval y Héctor Fernando Campero, quienes se encargarán de "sanar" a la gente.
A través de un comunicado, el Arzobispado de Salta informó sobre la novedad: "El Demonio, sigue empeñado en alejar a las almas de Dios invitándolas, a través de la tentación, a pecar. Por eso podemos afirmar que ese es el peor de los males, y causa de tantos otros. A esto se lo suele denominar, ‘acción ordinaria del demonio'".
En el texto, que lleva la firma de Cargnello, agregaron: "El Demonio, sigue empeñado en alejar a las almas de Dios invitándolas, a través de la tentación, a pecar. Por eso podemos afirmar que ese es el peor de los males, y causa de tantos otros. A esto se lo suele denominar, ‘acción ordinaria del demonio’".
Es por esa razón que el máximo responsable de la Iglesia local anunció la creación del ministerio y a los titulares a cargo del área: "La Iglesia, mediante el ministerio del exorcista, tiene el poder de expulsar los demonios de una persona posesa realizando el rito del exorcismo. Para esta Arquidiócesis he designado a los Pbros. Loyola Pinto y de Sancristóval y Héctor Fernando Campero como tales".
La postura de la Conferencia Episcopal Argentina
Desde la entidad religiosa aseguraron que no darán más detalles de la medida que los que figuran en el comunicado mientras que fuentes de la Conferencia Episcopal Argentina defendieron la iniciativa: "Que un obispo designe a un exorcista en su diócesis es una de las prácticas más antiguas que tiene la Iglesia. El obispo puede poner siempre a disposición a un sacerdote para este tipo de funciones. En algunas se conoce el nombre del responsable y en otras no. Es algo bastante habitual en la Iglesia".
El arzobispo de Salta fue acusado de violencia de género por las monjas del convento San Bernardo
La Conferencia Episcopal Argentina aclaró que cada territorio es autónomo en la toma de autoridades: "El nombramiento de un sacerdote en una determinada diócesis o territorio le corresponde al obispo del lugar. Tienen total autonomía para conducir la pastoral de su diócesis. En este caso, el Arzobispo de Salta habrá decidido los nombramientos que son propios de la arquidiócesis y siguiendo las necesidades locales"
Las denuncias por violencia de género contra Cargnello
El arzobispo de Salta, Mario Antonio Cargnello, fue acusado en abril de violencia de género ante la Justicia por tres monjas del convento San Bernardo de las Carmelitas Descalzas de esa provincia. Ellas aseguran vivir un calvario de agresiones físicas y psíquicas durante los últimos 20 años, según transmitió su abogada. Por esta razón la justicia le prohibió al Monseñor acercarse a la residencia de las hermanas.
En el convento de la calle Caseros, en el centro de Salta y residen 18 monjas y la abogada de las denunciantes, Claudia Zerda Lamas, contó que estas mujeres viven situaciones de violencia desde 1999, por lo que finalmente la madre superiora resolvió hacer la denuncia. "Ellas estaban paralizadas del miedo y es literal", lamentó la letrada a El Tribuno.
JP/fl