El 14 de diciembre de 1503, hace 518 años, nacía Michel de Notre Dame, más conocido como Nostradamus, un astrólogo, médico, boticario y supuesto adivino francés. Escribió una serie de profecías, compiladas en su libro “Les Prophéties” (Las profecías). Se le atribuye haber predicho eventos importantes a lo largo de los siglos como, por ejemplo, la elección de Jorge Mario Bergoglio como Sumo Pontífice.
Nació en Saint-Rémy-de-Provence, Francia, con el nombre de Michel de Nôtre-Dame. Sus antepasados eran judíos y se cree que provenían de la tribu de Isacar, una tribu famosa por tener adivinos. Antes de que Michel naciera su familia se convirtió al catolicismo. Inició sus estudios en la Universidad de Aviñón, pero al poco tiempo tuvo que buscar otra universidad debido a que la peste existente en esa época provocó la clausura de Aviñón. Luego ingresó a la Universidad de Montpellier para estudiar medicina, pero lo expulsaron por ser boticario, un oficio no permitido para los estudiantes.
Nostradamus no quería ser un pronosticador más; quería ser el mejor. Mientras trabajaba de astrólogo para gente rica, escribía una serie de profecías para años futuros, que luego compilaría en su libro “Les Prophéties”, publicado en 1555. En total, Nostradamus escribió 6.338 profecías. En general, están llenas de metáforas e interpretaciones ambiguas, pero aún así algunos sostienen que muchas de estas se han cumplido.
Una de las profecías que se considera cumplida es la que predijo la llegada de Jorge Bergoglio al papado. La misma decía lo siguiente: “Clero Romano el año mil seiscientos y nueve, en la cumbre del año se hará elección: De un gris y negro de la Compañía salido, que nunca fue tan maligno”. "Al principio habrá enfermedades mortales como advertencia, luego habrá plagas, morirán muchos animales, habrá catástrofes, cambios climáticos, y finalmente empezarán las guerras e invasiones del rey negro", agregó Nostradamus.
Lo curioso es que Jorge Bergoglio perteneció a la Compañía de Jesús, cuyo Padre General es conocido como “el papa negro”.
Nostradamus y la profecía de la pandemia
Por otra parte, dicen los intérpretes del vate francés que Nostradamus predijo la llegada del coronavirus: "La gran plaga de la ciudad marítima. No cesará hasta que se vengue la muerte. De la sangre justa, condenada por un precio sin delito", escribió el astrólogo. Si se piensa que se considera a Wuhan como el punto cero de la pandemia causada por el Covid-19, es verdad que no se trata de una ciudad costera. Sin embargo hasta hoy, se tiene al Mercado de Wuhan, en donde se venden animales y frutos de mar, como el epicentro del virus.
Para el año 2022, las profecías de Nostradamus son las siguientes:
- “Bajo el clima babilónico opuesto, grande será sin derramamiento”. Lo que quiere decir Nostradamus, según sus intérpretes, es que el hambre, la escasez de agua y los desastres que provoque el cambio climático llevarán a dos países a enfrentarse en una guerra para garantizar la supervivencia de sus habitantes.
- “Templos sagrados del tiempo romano, rechazarán los cimientos de su fundación”. Para los intérpretes, el profeta vaticinó el fin de la Unión Europea. En tiempos del Imperio Romano, el poder de la Antigüedad clásica nucleaba casi toda Europa, el norte de África y algunos puntos asiáticos bajo el poder romano. Sin embargo, los visigodos y la invasión de los pueblos germánicos sobre Europa dinamitaron el imperialismo europeo. Los intérpretes de Nostradamus creen que el profeta alude a la caída de la actual Unión Europea, ya fragmentada por la partida del Reino Unido, para algunos un anticipo del fin de la UE.
- “La muerte repentina del primer personaje, será cambiado y pondrán a otro en su reino”. Se cree que Nostradamus anticipó la muerte de una personalidad política. Los candidatos podrían ser varios, pero ya aparecieron voces que hablaron -no sin malicia- del líder de Corea del Norte Kim Jong-un, que solo tiene 37 años, y también de la longeva Reina Elizabeth del Reino Unido (95) e incluso de Joe Biden (79), el presidente de Estados Unidos.
- “Alrededor de la Gran Ciudad, habrá soldados alojados en campos y suburbios”. Esta predicción de Nostradamus hace pensar en una ciudad poderosa invadida por una potencia enemiga. Algunos apuntaron a Londres o París, pero cuesta creer que algún enemigo pudiera apoderarse del Big Ben o de la Torre Eiffel. Para ampliar las posibilidades de acierto, los intérpretes refieren una ciudad europea, en general, aunque el concepto Gran Ciudad podría atravesar todos los continentes. O por qué limitar el término invasión al campo de batalla? ¿Podría ser que el esotérico Nostradamus hubiera querido referirse a los estragos de la pandemia o de un eventual ataque terrorista?
NG / MM / ED
