Un cubano que residía en Chile murió ayer al caer del décimo piso de un hotel céntrico de Mendoza. El hombre fue identificado como Luis Sánchez Oliva de 70 años y aún se investiga qué fue lo que ocurrió. La policía señaló que Oliva despedía humo de su cuerpo.
El incidente ocurrió el pasado lunes 13 de marzo a las 9.34 en la intersección de calle España y Espejo, en la Ciudad de Mendoza. En ese momento un patrullero de Preventores que pasaba por el lugar sintió una explosión y pudo ver que una persona había caído desde un edificio.
El cuerpo estaba en el frente del Hotel Mendoza y no tenía signos vitales. A su vez, la policía observó que salía humo del cuerpo. La zona permaneció cerrada para evitar el acceso de transeúntes.
Oliva estaba hospedado en la habitación 705 desde el sábado y el lunes debía retirarse al mediodía. Cuando personal del hotel y policías lograron acceder a la habitación del cubano vieron que en el balcón aún se encontraban elementos que hacían suponer que el turista estaba desayunando antes de la fatal caída.
Tras su muerte, la Justicia investiga un posible suicidio, pero aún están buscando pruebas para ratificar esta hipótesis.
Respecto al humo y el estruendo, testigos señalaron que se trató del celular del hombre que explotó por el efecto de la caída. Criminalística y el personal judicial de la Oficina Fiscal Nº1 están a cargo de la investigación.
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