Los metrodelegados cumplieron este miércoles un paro entre las 5:30 y las 7:30 en la Línea D del subte de Buenos Aires como parte de las acciones que llevan a cabo en rechazo al acuerdo paritario firmado por la UTA.
En el marco de las medidas de fuerza, los gremialistas implementaron desde la semana pasada un mecanismo de protesta que consiste en dos horas de apertura de molinetes en una línea y al día siguiente dos horas de paro en esa misma línea. La semana pasado se abrieron molinetes y se paró el servicio en la líneas A y B y esta semana continuaron con la C y D.
El incremento que el sindicato de Roberto Fernández acordó con Metrovías consistió en un 15,2 por ciento que se completaría en tres etapas: un 5,7 por ciento al firmar el convenio; el 5,7 entre agosto y noviembre; y el resto a partir del año próximo. La Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP) que comandan los metrodelegados no puede participar de las paritarias ya que la Corte Suprema de Justicia les suspendió la personería gremial.
Metrovías lamentó la medida de fuerza gremial y recordó que la semana pasada realizó una denuncia en la cual solicitó al Ministerio de Trabajo "su inmediata intervención para que se declare la ilegalidad de dicha medida y se califique al subterráneo como un servicio de carácter esencial". "La negociación salarial se ha desarrollado hace más de diez días en el ámbito de la Subsecretaría de Trabajo porteña, en la cual se alcanzó un acuerdo por paritarias que fue rubricado por las partes intervinientes y que se ajusta completamente a derecho. Es por ello que el mismo no puede ser desconocido por ninguna de las asociaciones gremiales del subte", agregó la compañía.
