Dos policías de San Miguel, provincia de Buenos Aires, lograron este martes 11 de enero salvarle la vida a una beba de un año que estaba a punto de morir ahogada. El milagro se produjo dentro de un patrullero y fue posible gracias a maniobras de reanimación.
A horas de la tarde, cuatro efectivos se hicieron presenteS en una vivienda ubicada en la esquina de Av. Balbín y Sarmiento, de la mencionada localidad. Llegaron allí advertidos por la madre de la menor, quien les había dicho que algo ocurría con la bebé.
Una vez allí, subieron a la niña de un año y tres meses a un vehículo y se dirigieron con rapidez en dirección al Hospital Larcade. Mientras emprendían el trayecto a gran velocidad, la policía Laura Pagani se dió cuenta de que la pequeña no estaba respirando.
Decidió entonces subirla a su regazo y comenzó a practicarle RCP para reanimarla. "¡Se está ahogando! ¡Se está ahogando!", gritaba Pagani como puede ser visto en el metraje que recorre las redes sociales y es prueba del escalofríante momento.
Mientras tanto, otro de los oficiales (quien manejaba el patrullero) se abría paso entre los vehículos y la mamá de la nena gritaba desconsoladamente. Al poco tiempo, las técnicas de la policía surgieron efecto y la bebé comenzó a respirar.
Esto ocurrió pocos metros antes de arribar a la guardia. "Ahí está, ahí está ¡Está respirando¡ ¡Se está tranquilizando!", celebró la policía y le pidió a la madre que se tranquilizara. Acto seguido, la menor fue atendida por los médicos de guardia.
“Nos dieron el alta a las 22hs. Ahora a controlar, mi nena está bien, jugando, gritando y corriendo”, contó la mamá luego de que fuese intervenida. La agente que le salvó la vida a la beba realiza también tareas adicionales en la Policía Municipal.
Según datos del Ministerio de Salud de la Nación, el inicio inmediato de la reanimación cardiopulmonar por parte de alguien entrenado, aunque no sea un profesional, puede aumentar un 40% las posibilidades de supervivencia.
JFG