El ex futbolista y actual embajador del Mundial Qatar 2022, Khalid Salman, expresó que “la homosexualidad es un daño mental”, además agregó que “cuando los niños ven gays, aprenderán algo que no es bueno” y resaltó que al ser algo “prohibido” en su cultura, los turistas deberán amoldarse a sus normas.
Diferentes representantes de las distintas organizaciones disputaron un partido de fútbol en frente del edificio y los equipos fueron FIFA vs QATAR, a los cuáles los caracterizaron encadenados a los arcos para impedir que la comunidad LGBTIQ+ pueda convertir un gol.
Justin Lessner, miembro del grupo All Out, explicó que “la idea es alentar a las selecciones que jugarán el Mundial, a los futbolistas y a los patrocinadores a expresar su respaldo a los derechos de la comunidad LGBTIQ+ durante la Copa del Mundo en Qatar”.
Además, enfatizó que la FIFA se mostró “muy silenciosa” ante las declaraciones de Salman y agregó que es la obligación del ente máximo del fútbol “abogar por los derechos de la comunidad” y “asumir la responsabilidad de sus actos”.
La FIFA aclaró que cualquier tipo de discriminación por motivos de orientación sexual está estrictamente prohibido dijo el portavoz y agregó que “Qatar, como país anfitrión, está totalmente comprometido a garantizar que todos puedan disfrutar del torneo en un entorno seguro y acogedor, incluidos los miembros de la comunidad LGBTIQ+”
