En el amplio universo de argentinos varados por la pandemia global del coronavirus, hay una pequeña fracción de ellos, la décima parte aproximadamente, que se encuentran en lugares de difícil acceso incluso para los vuelos humanitarios. Son los compatriotas repartidos en los paraísos de arrecifes de Oceanía, en islas remotas de Asia y en lo profundo del territorio africano.
De los 21.493 argentinos que manifestaron su deseo de volver al país en el marco de la pandemia, acorde al reporte que presentó la Cancillería esta semana a modo de balance de gestión, 2313 se reparten en estos tres continentes. Son, por lejos, los destinos que menos compatriotas registran en las listas que elaboró el Ministerio de Relaciones Exteriores a partir de las bases consulares y las comunicaciones telefónicas de los propios solicitantes o sus familiares en la Argentina. Su distribución, de manera desigual a lo largo de diversas coordenadas, vuelve más complejo reunirlos para tender el puente hacia Buenos Aires.
Unos 2313 argentinos se reparten entre Asia, Oceaní y África, por lejos, el grupo más reducido al lado de América y Europa
Hay, por caso, lugares donde apenas figuran uno dos argentinos en solitario. Como en el Pacífico Sur, en Fiji —un conjunto de nueve islas y 300 islotes—,y en Papúa Nueva Guinea, donde solo se contabilizaban, hasta el 19 de abril, un argentino en cada uno de esos destinos. Muy cerca de allí, en las 15 islas que conforman el archipiélago de las Cook, apenas hay cuatro compatriotas que requieren volver.
Oceanía reúne el mayor número de los tres continentes porque restan todavía traer de regreso a cerca de 250 argentinos desde Nueva Zelanda y otros 150, aproximadamente, desde Australia. Son, en muchos casos, turistas pero también jóvenes argentinos que participaban de programas de Work & Travel suspendidos por la pandemia. Este último conjunto forma parte de lo que en Cancillería denominan los "nuevos varados".
Luego está África, con sus propias complejidades. El Gobierno trabaja en un acuerdo con Ethiopian Airlines para abrir un canal con la Argentina. En su base de operaciones, Etiopía, apenas hay tres compatriotas anotados. Los argentinos se reparten a lo ancho y largo de toda la geografía del continente.
El Gobierno trabaja en un acuerdo con Ethiopian Airlines para abrir un canal con la Argentina. En su país base, apenas hay tres compatriotas anotados
La mayor parte de ellos se localizan en los dos extremos. En Sudáfrica, la nación de Nelson Mandela, figuran 71 varados en contacto con el consulado local para poder retornar. Mientras que Marruecos, otro destino turístico en el norte arábigo, bañado por el Atlántico y el Mediterráneo, contabiliza 41.
Otros países africanos con argentinos que demandan ayuda son Kenia (25), Egipto (17), Nigeria (9), Mozambique (6), Túnez (6), Argelia (4) y Chad (2). Luego figuran los solitarios, lugres con apenas un argentino que pide volver, como Botsuana, eSwatini (ex Suazilandia), las islas de Cabo Verde, Gabón, Kenia, Congo y Tanzania.
Los números son muy dinámicos, cambian permanentemente. Se reducen cuando algún avión carretea con un grupo de ellos en sus butacas y, de inmediato, vuelve a crecer y se multiplica con la aparición de nuevos reclamos. Así como en Oceanía aparecieron los "nuevos varados" bajo la forma de los Work & Travel, en África se añadieron misioneros que engrosaron las estadísticas.
Así como en Oceanía aparecieron los "nuevos varados" bajo la forma de los Work & Travel, en África se añadieron misioneros que engrosaron las estadísticas.
La otra parte de los varados se distribuyen en los tres subcontinentes americanos, 12.509 en total, y 6.670 en Europa, según el informe de Cancillería que detalla cifras y gestiones realizadas por el Gobierno para conseguir el regreso de hasta 168.140 argentinos, entre el 17 de marzo y el 16 de abril. De ellos, 63.485 lo hicieron a través de los aeropuertos de Ezeiza y El Palomar. De ahí que las autoridades aseveran que casi el 90 por ciento de los varados ya pudo regresar al país.
MB / DS