Daniel Vila: “Karina Milei puso más énfasis en desmentir un Rólex que en desmentir las coimas”

—Hubo un debate importante en los medios cuando Pamela David, que además de conductora en América es su pareja, dijo que Karina Milei usaba un Rólex. ¿Por qué cree que la secretaria general de la Presidencia hizo una sobreactuación para desmentir a David pero no puso el mismo esfuerzo en desmentir las coimas que denunció Diego Spagnuolo?

—Creo que Pamela tuvo mucha suerte. Porque el trabajo periodístico, y más en radio y en televisión, es un trabajo sin red, y en el trabajo sin red uno se puede equivocar. Pamela cometió un error pero salió rápidamente a rectificarse, ese mismo día a las tres horas. Después de que Karina Milei había publicado algo en X, Pamela salió a disculparse públicamente, a decir que se había equivocado, y al día siguiente en el mismo lugar donde había manifestado la noticia, dijo que se equivocó, que no era un Rolex. Pero Karina Milei puso más énfasis en desmentir un Rólex, que en desmentir las coimas. El énfasis que le puso Karina Milei a desmentir que tenía un Rolex no fue el mismo énfasis para desmentir las coimas. Es más, por un Rolex, Karina Milei amenazó con ir a la Justicia, pero con la denuncia de Spagnuolo, no ha pasado nada hasta ahora. No es lógico que, si te pica una hormiga me pegás con un zapato, pero cuando se te viene un elefante encima, no digas nada. Por eso digo que Pamela tuvo mucha suerte, porque el hecho habla por sí solo.

—La primicia de los audios de Diego Spagnuolo se dio en un canal de streaming. Como empresario de medios, ¿cómo analiza ese fenómeno?

—Nosotros teníamos esos audios pero no los dimos a conocer porque primero teníamos que estar seguros de que esos eran auténticos. Hasta que salió un canal de streaming a anunciarlos. Por ahí, no tomaron ningún recaudo. La prudencia periodística ante la envergadura del problema indicaba que había que ser cautos, que había que chequear la información y no largarnos a tontas y a locas a hacer una denuncia, que no sabíamos si realmente tenía un sustento tecnológico creíble Que lo haya hecho un canal de streaming no me preocupa, porque hoy la primicia ya no existe. A partir de las redes sociales la primicia dura quince segundos.

—Jonathan Viale le hizo una entrevista al Presidente en la que se vio cómo Santiago Caputo lo rectifica y el periodista tiene que volver a hacer otra pregunta. ¿Qué hubiera pasado si esa entrevista se hacía en su canal?

—Comienzo por Jonathan Viale. Yo no creo en el periodismo militante. Me parece que le hemos hecho un gran daño al periodismo y al país en los últimos años con estas posturas tan sesgadas que han tomado algunos periodistas, olvidándose de la realidad y mirando mucho la ideología. Me parece que lo que ocurrió fue un hecho muy grave. En mi caso, no hubiera seguido una relación de trabajo, una relación de dependencia, con un periodista que acepta una situación como esa. Porque me parece que no solamente es dejar al descubierto el trabajo periodístico propio, sino también dejar al descubierto al medio al que pertenece. Y, si el medio no hace nada, quiere decir que está avalando esa connivencia en la entrevista. 

—¿Usted cree que TN avaló lo que pasó en esa entrevista con Jonathan Viale?

—Yo creo que sí, porque no se tomó ninguna medida. Aunque sea, podrían haber emitido un comunicado, promovido una suspensión, un llamado de atención, algo... No me pareció bueno que no hicieran nada.

—Esta semana hemos visto un hecho de censura previa promovido por el Gobierno. ¿Cómo ve el tratamiento del Presidente para con los medios y los periodistas?

—Creo que hasta acá los medios y, sobre todo los periodistas, han sido muy pacientes. Porque si te tratan de corrupto, de ensobrado, de ladrón y de todas esas cosas que dice el Presidente dirigiéndose al periodismo y a los medios, me parece que los periodistas han sido, hasta acá, demasiado prudentes. Y, en algunos casos complacientes. Pero, también hay que mirar la situación de la que venimos, la situación que vive la Argentina, una situación de muchísima división, muy peligrosa. Esta división social en algún momento tiene que terminar. Pero la violencia siempre viene de arriba para abajo y no de abajo para arriba. Si tenemos un Presidente que agrede, que insulta, que se pelea permanentemente, no solo con el periodismo, sino también con otros presidentes, con los artistas, es aún más complejo. Mi hija más chica tiene 13 años y va al colegio. ¿Cómo hago para que mi hija entienda que tiene que tener un concepto claro del respeto hacia la autoridad, si el ejemplo que está mirando, que es el del ciudadano número uno, que es el Presidente, le muestra una permanente y constante falta de respeto a la sociedad?

—¿Estamos atravesando el peor momento para el ejercicio periodístico?

—No es un buen momento para el ejercicio del periodismo, por varios motivos, pero no le echemos toda la culpa al Gobierno. Hay una incursión de la tecnología muy fuerte en los medios. La aparición de las redes sociales, la aparición de los canales de streaming, la inteligencia artificial. Y todo esto está pasando a una velocidad insospechada. Yo creo que los medios tradicionales van a seguir siendo muy importantes, porque la gente va buscar la credibilidad y la credibilidad la dan las firmas, ya sea la firma de una marca, como Perfil o América, o la firma de un periodista que va dar credibilidad. 

—Usted conoció a Carlos Menem y el apellido Menem hoy vuelve a estar en escena por los audios de Diego Spagnuolo. ¿Le cree a Martín Menem cuando niega las denuncias de corrupción?

—Tuve mucha relación con Carlos Menem. Desde que era gobernador. Es más, yo lo conocí siendo gobernador y le presenté a quien fue posteriormente su ministro de Obras y Servicios Públicos de la Nación, que fue quien hizo la reforma del Estado, Roberto Dromi. Nos vinculó el deporte, el fútbol. Luego, esa relación se enfrió cuando Menem fue presidente. El apellido Menem me puede traer a la memoria grandes cosas, como fue la reforma del Estado, poniendo a la Argentina en un lugar preponderante. Pero también me puede traer a la memoria cosas negativas, como fueron las causas judiciales que tuvo. Es un apellido conflictivo. 

—Agradecemos su participación en este Ciclo de Entrevistas con estudiantes de la Universidad del Sur de Buenos Aires (USBA) y le damos la posibilidad de cerrar con un comentario final.

—La verdad es que yo disfruto estas cosas porque me hacen repasar mi vida, porque me hacen reflexionar. Yo les agradezco a ustedes porque así como a ustedes les quedará algo mío, a mí también me queda algo de ustedes. Felicitaciones a Perfil por lo que hace con sus estudiantes. 

Martín Tiscornia y Silvina Díaz 
Estudiantes de Comunicación 
Universidad del Sur de Buenos Aires (USBA)