La economía brasileña creció un 3,4% en 2024

La economía brasileña creció un 3,4% en 2024, a pesar de las catástrofes ambientales que castigaron a esta potencia agropecuaria a lo largo del año, informó ayer la autoridad estadística.

Se trata del mejor desempeño de la mayor economía de América Latina desde 2021 (4,8%), según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). En 2023, el producto bruto interno había crecido 3,2%.

Los mejores desempeños del año pasado se registraron en los sectores de servicios (3,7%), comercio (3,8%) y construcción (4,3%). En contraste, el sector agropecuario se contrajo un 3,2%, en un año marcado por fuertes inundaciones en las regiones agrícolas del sureste del país, seguidas de la peor sequía en la historia reciente de Brasil. “Efectos climáticos adversos impactaron varios cultivos importantes” como la soja y el maíz, cuya producción cayó en 4,6% y 12,5% respectivamente, precisó el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística en un comunicado.

“El PBI en crecimiento significa más empleo e ingreso en la mano de los brasileños. El 2025 es el año de la cosecha”, celebró el presidente Luiz Inácio “Lula” da Silva en la red social X.

El resultado de 2024 estuvo ligeramente por debajo de las proyecciones. La Fundación Getúlio Vargas anticipaba un aumento del 3,5% en el PBI.

Desaceleración. En el último trimestre de 2024 el crecimiento se estancó frente a los tres meses anteriores (0,2%) a causa de “una caída en el consumo” por la inflación. A pesar del crecimiento económico estable y de mantener el desempleo cerca de sus mínimos históricos (6,5%), el aumento en los precios castiga la popularidad de Lula.

La gestión del mandatario izquierdista fue aprobada por el 24% de la población en febrero, el nivel más bajo durante sus tres mandatos, según una encuesta de Datafolha, instituto de referencia en Brasil.

El Ejecutivo anunció el jueves la eliminación de aranceles de importación para productos básicos como carne, café, azúcar, maíz, entre otros, en un esfuerzo por atajar la inflación de alimentos, que llegó en enero a 7,25% frente al mismo mes de 2024.