Un juego de cartas, una traición y un robo: detuvieron a dos expolicías por el crimen de un jubilado en San Vicente
La víctima tenía 79 años y fue hallado por su hijo atado y amordazado en su habitación. El interior de su casa estaba revuelta y se habían llevado su moto, en un caso en el que hay cinco detenidos y un prófugo.
El crimen de Edgardo Pino, un hombre de 79 años que fue hallado muerto dentro de su casa de la localidad de San Vicentem en la provincia de Buenos Aires, derivó en una intensa investigación en la que hay cinco personas detenidas, entre ellas dos exmiembros de la Policía Bonaerense, dos mujeres y un quinto sospechoso que se habría robado la moto de la víctima. Además, un sexto acusado se dio a la fuga y es buscado intensamente por las autoridades.
El hecho tuvo lugar el pasado 13 de noviembre, cuando un grupo de ladrones entró a robar en la vivienda ubicada en la calle 9 de Julio 247, en la mencionada ciudad del sur del Gran Buenos Aires. Pino fue encontrado tirado en su habitación por su hijo, que llamó al 911. Cuando los oficiales llegaron al lugar comprobaron que tenía las manos y los pies atados y ya no presentaba signos vitales.
Tras los primeros procedimientos, se detectó que el interior de la casa del jubilado estaba toda revuelta y además faltaba su moto azul marca Zanella. Además, se informó que el hombre tenía una prenda roja alrededor del cuello y había sido amordazado con un trapo, aunque no se observaban lesiones a simple vista.
El informe de la autopsia añadió que su muerte se produjo entre 12 y 24 horas antes de que su hijo lo hallara en su domicilio. Por este motivo, se dio intervención al Departamento de Homicidios junto a la DDI La Plata y personal de la Superintendencia Región Capital II, que llevó adelante el análisis de las cámaras de seguridad de la zona.
Durante los primeros días, Andrés, hijo de Edgardo, dialogó con el medio Diario Sur y aseguró que su padre era "una persona tranquila", acostumbrado a hablar con todos los vecinos. "Mi papá no tenía problemas con nadie, era muy clásico, de jugar a las cartas en el club y pasear a su perro, nada más", agregó.
Con el análisis de los videos de vigilancia, precisamente se pudo comprobar que Pino había estado jugando a las cartas en el Club General B. Mitre, ubicado a pocas cuadras de su casa. En ese lugar se encontró con el expolicía Gilberto González, quien le presentó a su hermano, Miguel González, otro exagente de la fuerza que tiene antecedentes penales.
Crimen de un jubilado en San Vicente: la detención de los sospechosos
Esa misma jornada, una hora más tarde, Miguel fue captado por una cámara caminando junto a otros dos hombres, quienes después lograron meterse en la vivienda de la víctima. Pasadas las 22 horas, el jubilado llegó a su hogar. No se registraron más movimientos, hasta que cerca de las 23.20 los sospechosos huyeron del lugar a bordo de la Zanella.
Con toda la información reunida, los investigadores apuntaron contra González por una presunta traición, en la que habría desempeñado la función de "marcador" para señalarle a los delincuentes el domicilio en el que tenían que meterse con el dato erróneo de que tenía una suma de dinero. La Policía allanó los domicilios de ambos hermanos, quienes quedaron detenidos.
Al mismo tiempo, se le tomó la declaración a allegados a Pino que dejaron trascender que una mujer, de nombre J. M. había estado merodeando la zona al momento del robo y le había preguntado a una vecina acerca de dónde se encontraba. Se cree que ella mantenía una relación íntima con el hombre y pronto sería liberada luego de que se descartara una teoría alternativa que apuntaba a posibles "viudas negras".
De la investigación surge que el exintegrante de la fuerza de seguridad había sido expulsado de la fuerza hace 29 años y cuenta con antecedentes penales, mientras que su hermano actualmente se encuentra en situación de retiro activo.
En las últimas horas, también se realizaron operativos en las viviendas de los acusados que están sospechados de ingresar al domicilio de la calle 9 de Julio, Augusto V. y Yair C., donde se lo logró la detención del primero de ellos, así como también de la pareja de C., Micaela R., por encubrimiento. Por el momento, no se pudo dar con el paradero de Yair, que permanece prófugo.
El caso está en manos de la UFI descentralizada N°1 y el Juzgado de Garantías N°8 de San Vicente. Durante los operativos policiales se secuestraron celulares, ropa y una mochila que se habría utilizado en el hecho, según se observa en las cámaras de seguridad. También se incautaron plásticos de una moto Corven Energy 100 azul, un reloj pulsera, precintos y tarjetas SUBE usadas para llegar hasta esa zona.
FP cp