Plátanos en CABA: cuántos hay en la Ciudad y cuánto tuvo que ver Sarmiento

La primavera trae consigo la llegada de la "pelusa" amarilla de los plátanos, árboles que se encuentran en varios barrios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y a lo largo y ancho del país. Esta época es el peor momento del año para los que padecen alergias respiratorias, pero ¿quién fue el responsable de traerlos a la Argentina?

Según el último censo de arbolado realizado en 2018, en la Ciudad hay 430 mil árboles de los cuales cerca de 70.000 son plátanos que integran el Arbolado Público Lineal (APL). El Platanus hispánica o plátano de sombra pertenece a la familia de las platanáceas. Es una variedad de árbol de rápido desarrollo que puede sobrepasar los 40 metros de altura.

Resultan atractivos para el paisaje urbano por la sombra que producen, la resistencia a la polución y, por su longevidad, hay especies que pueden tener 300 años de antigüedad. Tiene copa redondeada y ramas retorcidas con ramillas terminales colgantes.

El fruto es pequeño y tiene un penacho de pelos llamado aquenio en su base y suele producir una enorme cantidad de polen. Florece en primavera y los frutos maduran a finales del verano.

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¿Los plátanos son los árboles más odiados por los alérgicos? 

Los plátanos se encuentra en el podio de los árboles más odiados para los alérgicos debido a que los aquenios (pelusa) genera irritación nasal, estornudos y rinitis alérgica. Además, se acumulan en las veredas generando el taponamiento de los desagües.

El barrio porteño que más plátanos tiene es Palermo, con 5.402 especies, seguido por Villa Devoto y Flores. Belgrano, Villa Crespo y Caballito están más alejados de los primeros lugares y el distrito más afortunado es Liniers, donde esta especie es poco numerosa y roza los 1.500 árboles.

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La historia de los plátanos en Argentina

Durante la presidencia de Domingo Faustino Sarmiento se le dio importancia a la plantación de árboles. El padre de la educación nacional fue el principal impulsor del Parque Tres de Febrero, inaugurado en 1874, y de importar la exótica especie Platanus hispánica desde Estados Unidos.

Entre otras especies, Sarmiento también introdujo a a la Argentina el eucalipto, importado de Australia y que diseminó por todos los rincones del país. Su objetivo final era convertir al país en un auténtico pulmón del continente y evitar la degradación ecológica.

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