Las acciones de Apple Inc. declinaron y se situaron el lunes cerca de territorio bajista ante la preocupación de que los consumidores ya no busquen su producto más emblemático, el iPhone.
Las acciones cerraron a un récord de US$232,07 el 3 de octubre. Desde entonces han caído casi 20 por ciento –el umbral oficial de un mercado bajista- en tanto múltiples proveedores indicaron que la compañía está reduciendo los pedidos de componentes para los iPhones más recientes. Las ganancias de Apple profundizaron los temores cuando la compañía dio a conocer un crecimiento plano en unidades y dijo que dejaría de revelar cuántos teléfonos inteligentes vende cada trimestre.
Las acciones de Apple bajaron otro 1,47 por ciento, a US$183,13 en las operaciones del martes anteriores a la apertura del mercado.
Apple y sus seguidores dicen que la compañía aún puede generar un crecimiento de los ingresos en un mercado estancado de teléfonos inteligentes mediante el recurso de cobrar más por aparato y de vender a los clientes una creciente cantidad de películas y música digital, además de otros servicios. Sin embargo, se trata de estrategias cuya eficacia no está del todo comprobada, en especial si se las compara con el peso del iPhone en los últimos 10 años.
“Cuando se llega a estas situaciones en que el producto actual podría no tener un desempeño tan bueno como esperaban los inversores, algunos se asustan y luego el temor se alimenta a sí mismo”, dijo Jason Benowitz, administrador de cartera de Roosevelt Investment Group, que posee acciones de Apple. “No estamos muy preocupados. Parte de esto probablemente sea ruido, como pasa siempre”.
Las acciones de la compañía con frecuencia se ven afectadas por señales de su enorme cadena global de proveedores. El año pasado, advertencias de algunos socios manufactureros hicieron temer que el nuevo iPhone X de Apple pudiera ser un fracaso, Pero cuando la compañía dio a conocer los resultados de la temporada de festividades de fin de año, las cifras de ventas del aparato eran contundentes, lo que impulsó una recuperación de las acciones.
Esta vez más proveedores y firmas que montan iPhones han advertido sobre pedidos más débiles. Las ganancias decepcionantes de Hon Hai Precision Industry Co. y las estimaciones de menores ingresos de cuatro compañías más pequeñas, entre ellas Japan Display Inc., llevaron a los inversores a concluir que Apple no está generando sus habituales ventas fuertes iniciales de nuevos modelos de iPhone.
“Los inversores más orientados al crecimiento piensan que ese crecimiento no es como pensaban, en especial en el caso de los nuevos teléfonos”, dijo Kim Forrest, administradora de cartera de Fort Pitt Capital Group. Apple exacerbó los temores al cambiar la forma en que da a conocer las ventas de unidades, agregó. “Eso fue una gran bandera roja. Da la impresión de que no querían tener que contestar esas preguntas”.
El iPhone representa alrededor de las dos terceras partes de los ingresos de Apple, de modo que una falta de crecimiento de unidades de ese producto es un problema. Para el año fiscal 2019, analistas pronostican que las ventas se expandirán 5 por ciento, menos que el 16 por ciento del año anterior, según datos que reunió Bloomberg.