La urgencia de Argentina por equilibrar sus libros podría poner en peligro la explotación de gas natural en Vaca Muerta, la formación de shale en la Patagonia. El ministro de Energía, Javier Iguacel, anunció a los medios que ningún otro proyecto podría beneficiarse de un programa de subsidios que fija los precios hasta finales de 2021. Empresas como la estatal YPF SA, Tecpetrol SA y la Compañía General de Combustibles SA reciben US$7,50 por millón de BTU (unidad térmica británica) este año para gran parte de su producción de gas no convencional, una cifra que se reducirá gradualmente a US$6 en 2021.
La financiación favoreció la inversión en infraestructura, como plantas de tratamiento y evacuación, lo que impulsó el progreso en Vaca Muerta, con el que el Gobierno tiene esperanzas de revertir el déficit comercial del gas natural. No obstante, no se consideran nuevos proyectos, dijo Iguacel. Argentina necesita reducir los costosos subsidios a la energía a fin de eliminar su déficit presupuestario para 2020 tras acordar una línea de crédito stand-by de US$50.000 millones del Fondo Monetario Internacional. "No está claro si las nuevas áreas sin infraestructura, donde se necesitan construir instalaciones, serían rentables sin el subsidio a los precios", dijo Juan Manuel Vázquez, jefe de análisis de capital e inversión en Puente Hnos. SA.