La Unión Europea ha logrado "avances limitados" para hacer frente a la amenaza que supondría un brexit sin acuerdo para los servicios financieros, y se necesitan medidas urgentes, según el Banco de Inglaterra.
En el poco tiempo que queda antes de que el Reino Unido abandone la UE el próximo mes de marzo, "no es posible que las empresas por sí solas mitiguen plenamente los riesgos de interrupción de los servicios financieros transfronterizos", dijo el Banco de Inglaterra (BOE, por sus siglas en inglés). "La necesidad de que las autoridades lleven a cabo acciones de mitigación ahora es apremiante".
El BOE lleva meses advirtiendo que un brexit desordenado, sin período de transición, pondría en peligro billones de libras de contratos de derivados y millones de pólizas de seguros. Si bien el Reino Unido ha anunciado medidas para reducir los riesgos, incluyendo un plan para emitir licencias temporales si es necesario, la UE ha insistido en gran medida en que le corresponde a la industria prepararse para lo peor.
Dados los recursos necesarios para que los bancos y los reguladores se preparen para el brexit, el BOE retrasará el inicio de la prueba de resistencia del próximo año hasta septiembre de 2019, y los resultados se publicarán en junio de 2020.
Los resultados de la prueba de resistencia de este año se publicarán el 5 de diciembre.
El Comité de Política Financiera del BOE reiteró el martes su opinión de que el sistema financiero del Reino Unido "sería lo suficientemente fuerte para atender a hogares y empresas del Reino Unido a través de un brexit desordenado y sin acuerdo".
El sistema también tiene la capacidad de absorber más costos por conductas indebidas e insolvencia que podrían surgir por "la intensificación de las tensiones comerciales y un mayor endurecimiento de las condiciones de financiamiento para los mercados emergentes", indicó el comité en una declaración de su reunión política del 3 de octubre.
El comité también señaló que está preocupado por el rápido crecimiento de los préstamos apalancados, incluyendo los préstamos a empresas británicas. Y evaluará cualquier implicación para los bancos en las pruebas de estrés de este año.
Las últimas advertencias del BOE sobre el brexit se producen después de que el principal regulador de los mercados de la UE exhortara a los responsables de políticas del bloque a garantizar que los bancos del continente mantendrían el acceso a las cámaras de compensación londinenses en caso de una salida sin acuerdo.
Sin la intervención de las autoridades de la UE, las normas del bloque "crean inseguridad jurídica" en cuanto a si los miembros de la UE podrían cumplir con sus obligaciones para con las cámaras de compensación del Reino Unido, indicó el BOE.
Para garantizar el funcionamiento seguro de las cámaras de compensación y evitar riesgos de estabilidad financiera, "especialmente en una insolvencia, los contratos que los miembros compensadores de la UE tienen con las contrapartes centrales del Reino Unido tendrán que cerrarse o transferirse antes de marzo de 2019", señaló el BOE. "Esto será costoso para las empresas de la UE y podría agotar la capacidad del mercado de derivados".
El comité mantuvo las reservas de capital anticíclico del Reino Unido en un 1 por ciento, y revisará la tasa en su reunión del 28 de noviembre. Esta reserva es un nivel de capital que los bancos deben acumular en épocas de bonanza y utilizar para respaldar los préstamos cuando la economía se vuelve difícil.
