El equipo económico del presidente Luiz Inácio Lula da Silva considera que Argentina, golpeada por una espiral inflacionaria y una grave sequía, necesitará pronto algún tipo de apoyo financiero adicional, según un funcionario del Gobierno brasileño familiarizado con las discusiones.
El funcionario, que pidió anonimato para revelar discusiones internas, describió a Argentina como un socio regional que es demasiado grande para colapsar, pero no lo suficientemente relevante en el escenario global para convencer a los Fondo Monetario Internacional o incluso China para movilizar los recursos adicionales que el país necesita con urgencia.
La alternativa, dijo la persona, sería buscar el apoyo de Chile y Colombia, las otras dos grandes economías sudamericanas cuyos presidentes participan en una cumbre organizada por Lula en Brasilia el martes.
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Brasil aún no ha elaborado un plan para ayudar a Argentina, agregó el funcionario, y es poco probable que transfiera fondos directamente al país.
Un vocero del presidente de Argentina Alberto Fernández dijo que el país nunca ha pedido un préstamo bilateral pero que Brasil y Argentina comparten la misma perspectiva sobre la situación del país. Lula ha dicho que es trabajando activamente para ayudar a Buenos Aires superar la crisis.
Los problemas de la Argentina
Los problemas económicos de Argentina están aumentando a medida que los precios al consumidor se disparan un 109% al año, lo que genera preocupaciones de que podrían caer en una espiral de hiperinflación justo cuando el país se prepara para unas elecciones presidenciales cruciales en octubre.
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La administración de Fernández elevó la tasa de interés de referencia al 97%, pero no logró controlar la inflación ya que el Banco Central sigue imprimiendo pesos para financiar el gasto público.
Desesperado por aumentar reservas de divisas de Argentina y evitar una devaluación desordenada del peso, Fernández envió al ministro de Economía Sergio Massa y una gran delegación a China para negociar un línea de intercambio de divisas más grande con Pekín.
Lula también ha pedido a su ministro de Hacienda Fernando Haddad para asistir a una reunión de la Nuevo Banco de Desarrollo, el banco de naciones BRICS que incluye a Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, para cabildear en busca de alternativas de asistencia para Argentina. Haddad no pudo viajar a China, pero participó en la reunión de forma remota.
LM
