La eléctrica estatal de Brasil, Eletrobras, ha vendido su distribuidora más problemática, completando uno de los últimos pasos para sanear su balance de deuda creciente.
Un consorcio liderado por la empresa de energía de la Amazonia Oliveira Energia Geração e Servicos Ltda y la distribuidora de combustible Atem fue el único postor y pagará el precio mínimo por Amazonas Energia SA, que distribuye energía en el estado brasileño de la selva amazónica. El ministro de Energía, Moreira Franco, dijo que la venta del distribuidor era un alivio para Eletrobras.
"Esta subasta es una victoria y ayudará a hacer de Eletrobras una compañía mucho más saludable", dijo Moreira a los medios después de la subasta en la bolsa de valores de São Paulo.
La venta de Amazonas elimina la posibilidad de que el distribuidor cierre sus puertas a finales de este mes y deje a los clientes en el estado de la Amazonia sin una distribuidora eléctrica en funcionamiento para 2019.
El consorcio pagará un precio simbólico de 50.000 reales (US$12.750), pero los ganadores deberán gastar un total de 5.400 millones de reales para hacerse cargo de la compañía, debido a las inversiones obligatorias y la carga de deuda. Oliveira Energia también compró otro distribuidor de electricidad de Eletrobras, Boa Vista, en agosto.
Centrais Eletricas Brasileiras SA, como se conoce formalmente a Eletrobras, se está deshaciendo de activos según sus planes de salir de la distribución eléctrica y centrarse en la transmisión de energía y negocios de generación en el futuro. Las actividades de distribución registraron una pérdida de 1.000 millones de reales en el tercer trimestre.
Las actividades de distribución registraron una pérdida de 1.000 millones de reales en el tercer trimestre
La medida era parte del plan del presidente, Michel Temer, de privatizar la empresa controlada por el Estado, aunque es menos probable que el gobierno entrante del presidente electo, Jair Bolsonaro, siga adelante con el plan. Bolsonaro fue elegido ante promesas de importantes privatizaciones, pero ahora dice que algunos sectores son estratégicos y se mantendrán en el sector público, entre ellos la energía.
Conversaciones para crédito
El consorcio Oliveira-Atem se encuentra en conversaciones avanzadas con agencias europeas de crédito a la exportación, entre ellas la francesa Proparco SA y la alemana DEG para financiar inversiones en la Amazonia, dijo Thais Prandini, representante del grupo, a los medios en São Paulo. Tres compañías más podrían participar en el consorcio en los próximos meses, agregó.
La venta de la distribuidora de la Amazonia estuvo favorecida por dos acuerdos en las últimas semanas: una medida del Congreso que aumenta su atractivo al liberar a los inversores de 3.000 millones de reales de costes de combustible y un acuerdo tras una larga disputa que el distribuidor tuvo con otra empresa estatal, Petróleo Brasileiro SA.
La venta de Amazonas fue “otro buen paso” para Eletrobras después de una mejora significativa en los niveles de apalancamiento en los últimos dos años, según Roger Horn, analista de mercados emergentes de SMBC Nikko Securities America Inc.
"Si bien ya no se habla mucho de una privatización total de Eletrobras, el sector privado podrá introducir eficiencias operativas en las empresas de distribución, tomar mejores decisiones de inversión y reducir costes" para los consumidores, dijo Horn por correo electrónico.
Amazonas Energia es la quinta de seis distribuidoras que se venden en subasta conforme Eletrobras limpia su balance, todas a un mismo precio simbólico. La distribuidora estatal de Alagoas, conocido como Ceal, será la último en salir a subasta, en una oferta programada para el 19 de diciembre.
