Incluso antes de que el brote de coronavirus arrasara con la economía de China, los banqueros dudaban cada vez más sobre el nivel real de los préstamos incobrables del país, lo que indica que el problema solo podría empeorar este año.
Cerca de 83% de los replicantes a la encuesta anual de China Orient Asset Management Co.., realizada antes de que estallara el virus, dijo que los datos oficiales de préstamos vencidos subestiman las cifras reales, un aumento en comparación con 69% en la encuesta anterior. Aproximadamente 23% dijo que las cifras oficiales eran “significativamente” más bajas que la realidad.
Los hallazgos empeoran la creciente preocupación por el deterioro de la calidad de los activos de los bancos chinos, a medida que la segunda economía más grande del mundo está a punto de tener su peor desempeño en la era posterior a Mao. Las deudas incobrables subieron en el primer trimestre, incluso cuando prestamistas aplazaron los pagos y transfirieron un total combinado de 1,5 billones de yuanes (US$212.000 millones) en préstamos para ayudar a las pequeñas empresas a combatir las consecuencias del mortal virus.
El índice oficial de morosidad subió solo 0,06 puntos porcentuales a 2,04% a fines de marzo, luego de que las autoridades permitieron a bancos adoptar un enfoque más indulgente sobre cómo clasificar la deuda incobrable, según la Comisión Reguladora de Banca y Seguros de China.
Si bien se proyecta que la totalidad de los préstamos incobrables aumentará lentamente en los próximos tres años, 87% de los encuestados dijo que las deudas en dificultades en el sector inmobiliario podrían crecer notablemente este año, según la encuesta realizada por China Orient, una de las cuatro administradoras estatales de deuda incobrable.