Argentina avanza en la dirección correcta según varias medidas vigiladas de cerca por los inversionistas, pero los datos del mercado laboral, vitales para los ciudadanos comunes, reflejan una realidad diferente.
El sector privado argentino perdió 10.500 empleos asalariados en diciembre respecto al mes anterior, anunció el gobierno el jueves. Los salarios probablemente quedaron rezagados respecto a la inflación, que es de alrededor de 50 por ciento.
Mientras que los votantes usarán el crecimiento del empleo y los salarios para evaluar al presidente Mauricio Macri, quien se postula para la reelección el 27 de octubre, los inversores se han visto alentados por otros indicadores.
Argentina ha registrado cinco excedentes comerciales mensuales consecutivos después de más de un año de déficits. Mientras tanto, el gobierno está cerca de equilibrar su presupuesto, como parte de una línea de crédito por US$56.000 millones con el Fondo Monetario Internacional.