Las perspectivas para Europa no han sido exactamente sobresalientes en los últimos tiempos. Si bien el par euro-dólar es el que se comercializa más activamente en el mundo, la zona del euro ha estado luchando con una economía regional caída. Las consecuencias de las disputas comerciales mundiales, los riesgos derivados de la incertidumbre del brexit y grandes franjas de deuda con rendimientos negativos fueron algunas de las causas.
Todo eso ha sido una traba para el euro, que se ha quedado atrás de la mayoría de sus pares más importantes este año. Pero a medida que algunos de estos desafíos retroceden la moneda se está convirtiendo una vez más en una opción atractiva para algunos compradores, y en octubre tuvo su mejor mes frente al dólar desde principios de 2018.
Algunos inversionistas apuestan a que una mejora gradual en el crecimiento y el progreso en las conversaciones entre Estados Unidos y China podría avivar el sentimiento de riesgo e impulsar el euro al alza.
“Un periodo de relativa estabilidad en las negociaciones comerciales” debería impulsar la moneda, asegura Francesca Fornasari, administradora de cartera en Insight Investment, que tiene US$844.000 millones en activos bajo administración. También hay “expectativas de un mayor cambio hacia la política fiscal como un medio para apoyar el crecimiento en Europa”.
“Un periodo de relativa estabilidad en las negociaciones comerciales” debería impulsar la moneda europea, asegura Francesca Fornasari, administradora de cartera en Insight Investment.
En lo que va del año, no ha sido una buena idea apostar contra el dólar, incluso en medio de expectativas de que se debilitaría. El dólar se ha recuperado constantemente después de periodos de debilidad y alcanzó un máximo de más de dos años a principios de octubre. Antes del mes pasado, el euro cayó durante ocho de nueve meses.
Vientos en contra
Aún así, algunos de los principales vientos en contra del año para el euro están disminuyendo. Tanto los funcionarios chinos como los estadounidenses han hablado positivamente sobre las negociaciones en curso para llegar a un acuerdo comercial preliminar, lo que podría estimular aún más el apetito por el riesgo y eliminar la necesidad del dólar como refugio.
Además, la fecha límite para el brexit se ha retrasado hasta el 31 de enero, lo que elimina la amenaza de una salida sin acuerdo este año. La nueva presidente del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, recientemente hizo sonar un tono más fuerte que su predecesor respecto a impulsar el estímulo fiscal para facilitar el crecimiento.
Estrategas de JP Morgan Chase & Co. liderados por Paul Meggyesi dicen que están “explorando oportunidades” para posiciones largas del euro frente al dólar, pero siguen siendo cautelosos, en parte debido al malestar económico. El grupo se siente alentado por los datos que muestran que la zona euro registró un superávit anual récord en su saldo básico, una medida que incluye cuenta corriente, patrimonio neto y flujos netos de inversión extranjera directa.
El grupo de estrategas de JP MorganChase & Co. manifestó que se siente alentado por los datos que muestran que la zona euro registró un superávit anual récord en su saldo básico.
“Este superávit básico masivo debería amortiguar el euro contra una futura decepción económica”, escribieron los estrategas en una nota el 1 de noviembre.
Un repunte en los pedidos de fábricas alemanes se sumó a las señales de que la economía de la zona euro ha superado lo peor de sus problemas recientes.
Trazar el futuro
Los patrones de precios también respaldan la idea de una recuperación del euro, según los estrategas técnicos de Citigroup Inc., dentro de los que se incluye Tom Fitzpatrick.
El par euro-dólar en octubre completó un mes alcista exterior, lo que significa que el rango de negociación del mes fue más amplio que el mes anterior, con precios que cerraron a un nivel más alto, dijeron los estrategas. Por otro lado, el índice Bloomberg Dollar Spot y el índice del dólar estadounidense tuvieron meses externos bajistas, lo que sugiere una amplia debilidad de la moneda, aseveraron.
Mientras tanto, los estrategas de Standard Chartered Geoff Kendrick y Steve Englander dicen que el mercado pudo haber visto los mínimos en el par de divisas.
El sentimiento entre los operadores de opciones está cerca del más optimista para el euro frente al dólar desde julio, durante periodos que van desde tres meses hasta un año.
Las barreras permanecen
Aún así, la moneda compartida enfrenta desafíos y no todos están convencidos de que su hora de brillar esté cerca. Los datos de esta semana mostraron que el sector manufacturero de la región del euro de 19 países se mantuvo firmemente en contracción, incluso cuando subió el índice de gerentes de compras. Las pérdidas de empleo se aceleraron y los libros de pedidos se deterioraron.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió el miércoles a Europa sobre la preparación de planes de emergencia para una recesión económica, a medida que se extienden los riesgos para el panorama de la región y la política monetaria casi ha agotado su arsenal. La Comisión Europea recortó sus perspectivas de crecimiento e inflación el jueves.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió el miércoles a Europa sobre la preparación de planes de emergencia para una recesión económica
La economía de la región ha sido “afectada” por la guerra comercial entre Estados Unidos y China, y su fabricación y sus datos de inflación siguen siendo lentos, asegura Anne Mathias, estratega de tasas globales y FX en Vanguard.
No ayuda que los rendimientos de Europa se encuentren entre los más negativos del mundo. Los inversionistas hambrientos de rendimiento se sienten atraídos por los activos estadounidenses, a medida que la Reserva Federal detiene su ciclo de reducción de tasas.
Sin embargo, los elementos que respaldan la moneda compartida mitigan los vientos en contra, de acuerdo con Sebastien Galy, estratega macro en Nordea Investment.
“Una vez que la máquina de crecimiento china comience a funcionar nuevamente, las exportaciones de la zona euro aumentarán, apoyando al euro, mientras que los chinos venderán dólares entrantes para comprar euros”, asegura. “Eso debería impulsar” la moneda compartida al alza.