Perú declaró estado de emergencia en parte de su frontera con Ecuador después de un aumento en el flujo de migrantes venezolanos que ingresaron al país antes de que entraran en vigor las nuevas normas de inmigración. La medida surge como respuesta al "peligro inminente" para la salud y el saneamiento en la zona debido al aumento de la inmigración, según una declaración publicada el martes en el periódico gubernamental El Peruano.
Más de 300.000 venezolanos han ingresado al país en lo que va de año, por lo cual las autoridades de la región fronteriza de Tumbes se han visto sobrepasadas y existe preocupación por la propagación de la malaria y otras enfermedades. Miles de venezolanos aceleraron su viaje a Perú luego de que el gobierno anunciara que exigirá pasaportes para ingresar a contar del 25 de agosto. El canciller Néstor Popolizio comentó que se necesita un enfoque multilateral para ayudar a los venezolanos que huyen del colapso económico y la crisis humanitaria en el país caribeño.
Perú y otros países de la región pretenden solicitar ayuda a Naciones Unidas para gestionar el ingreso de venezolanos, afirmó el martes el ministro al medio limeño Radio Programas. Se buscaría asistencia en tareas como vacunaciones sanitarias y ayuda para que los inmigrantes se establezcan y encuentren trabajo. La cifra de venezolanos que ingresan a Perú desde Ecuador cayó a 1.630 el domingo frente al promedio diario cercano a 3.000 y los más de 5.000 registrados a principios de este mes, según la oficina nacional de migraciones.
