El fiscal especial de Estados Unidos Robert Mueller arremetió contra una compañía propiedad de Yevgeny Prigozhin, oligarca ruso conocido como el "Cocinero de Putin", y le dijo a un juez federal que los cargos presentados contra la firma –conspiración para engañar a los estadounidenses– no dependen de probar que la intervención electoral es un crimen.
La oficina del fiscal especial escribió en un documento que los fiscales solo tienen que demostrar que la empresa, Concord Management and Consulting, y sus supuestos cómplices de conspiración acordaron participar en una conducta que violaba sus obligaciones para registrarse como agentes extranjeros e informar sobre los gastos de campaña. "El gobierno no está obligado a demostrar que los conspiradores realmente violaron" las leyes federales de financiamiento de campañas y elecciones, escribieron los fiscales.
Los cargos presentados en febrero describen una amplia gama de conductas coordinadas que pretendían influenciar las actitudes de los votantes hacia los candidatos presidenciales de EE.UU.
"La acusación indica que uno de los propósitos de estos múltiples actos de engaño era frustrar las funciones legítimas del gobierno de EE.UU.", escribieron los fiscales. "Esas acusaciones son suficientes para respaldar la imputación por conspiración para engañar a EE.UU., independientemente de si los acusados acordaron participar en conductas que violaban" las leyes federales de financiamiento de campañas y elecciones.
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Concord y 13 ciudadanos rusos, incluido Prigozhin, fueron acusados en febrero de conspiración para engañar a EE.UU. mediante el montaje en 2016 de campañas en las redes sociales destinadas a ayudar al candidato presidencial republicano, Donald Trump, y perjudicar a su rival demócrata, Hillary Clinton. La acusación también incluía denuncias de fraude electrónico y suplantación de identidad, ya que los rusos supuestamente adoptaron identidades estadounidenses como parte de su campaña para intervenir en la elección.
Ni Prigozhin ni los otros ciudadanos rusos han respondido a las acusaciones, pero Concord Management contraatacó. El abogado de la compañía, Eric Dubelier, de Reed Smith, señaló que el hecho de que Concord no se haya registrado como agente extranjero o haya informado sobre gastos relacionados con la campaña no constituye un delito.
La semana pasada, el juez federal a cargo del caso solicitó al equipo de Mueller que respondiera a esa afirmación.
La respuesta del gobierno fue presentada por Jonathan Kravis, de la oficina del fiscal de EE.UU. en el distrito de Columbia, junto con la oficina del fiscal especial, representado por Michael Dreeben y Jeannie Rhee.
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