Irán continuó respetando los límites nucleares de su histórico acuerdo con las potencias mundiales, incluso después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, abandonara el pacto, según monitores internacionales. En su primer informe desde que EE.UU. volvió a imponer sanciones bancarias y petroleras el 5 de noviembre, el Organismo Internacional de Energía Atómica, OIEA, dijo que Irán todavía está permitiendo inspecciones intrusivas mientras mantiene su capacidad y material nuclear por debajo de los umbrales permitidos, conforme al acuerdo de julio de 2015, según un informe restringido de 5 páginas publicado el lunes y visto por Bloomberg News.
El OIEA realizó inspecciones sorpresa "en todos los sitios y ubicaciones en Irán que debía visitar", según el informe trimestral. “La organización continúa verificando la no desviación de material nuclear declarado. Las evaluaciones con respecto a la ausencia de material nuclear no declarado y las actividades de Irán siguieron en curso". Mientras que la decisión de EE.UU. de abandonar el Plan de Acción Integral Conjunto entre Teherán y las potencias mundiales ha comenzado a mermar la economía de Irán, las otras naciones que se unieron al acuerdo –Francia, Alemania, el Reino Unido, Rusia y China– se han comprometido a apoyarlo.
Países como China, India y Corea del Sur obtuvieron exenciones de EE.UU. para seguir importando petróleo iraní, aunque el Departamento de Estado sostiene que deben seguir reduciendo los volúmenes. La Unión Europea está tratando de desarrollar un "vehículo de propósito especial" para mantener el flujo de transacciones financieras. Una mejora en el reactor, prometida en el marco del acuerdo nuclear, también continúa con la aprobación estadounidense.
"EE.UU. ha dejado suficiente espacio para seguir implementando el PAIC desde un nivel técnico", dijo Ellie Geranmayeh, miembro principal del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, por teléfono el lunes. "Lo que veremos, al menos durante los próximos dos meses, es el cumplimiento continuo a medida que Irán evalúa el nuevo análisis de costo-beneficio de permanecer en el acuerdo".
Mientras que los funcionarios estadounidenses han admitido a regañadientes que Irán continúa cumpliendo con sus obligaciones nucleares bajo los términos del acuerdo –que limitó la capacidad y la producción de material que podría usarse en armas a cambio de una disminución de sanciones– acusan al gobierno de Teherán de continuar su programa de misiles balísticos y de inmiscuirse en los conflictos del Medio Oriente desde Siria hasta Yemen.