Los líderes de la Unión Europea se comprometieron el martes a donar al menos cien millones de dosis de vacunas contra el COVID-19 a países en desarrollo para fines de año, y dijeron que se esforzarán por aumentar la producción mundial, mientras gran parte del mundo enfrenta dificultades con sus campañas de vacunación.
En una cumbre de dos días en Bruselas, los líderes aprobaron "acelerar el reparto de vacunas para apoyar a países necesitados", destacando que la UE es el mayor exportador de vacunas contra el coronavirus, según las conclusiones finales. También se comprometieron a continuar los esfuerzos para fomentar las instalaciones de producción global "a fin de satisfacer las necesidades globales".
La mitad de los adultos de la UE habrán recibido su primera dosis de la vacuna esta semana, dijo el martes Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, en una publicación en Twitter.
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Si bien las campañas de vacunación tienen un avance sostenido en Europa, la mayor parte del mundo está muy rezagada.
Malasia debe prepararse para lo peor, ya que el aumento de los contagios está siguiendo una tendencia exponencial, advirtió el director general de Salud, Noor Hisham Abdullah, mientras el país supera a India en términos de casos diarios per cápita. El país del sudeste asiático está imponiendo restricciones más duras a los desplazamientos después de que las cifras diarias de contagios y muertes aumentaran a máximos históricos esta semana.
Los líderes de la UE también se comprometieron a ayudar a desarrollar capacidad de fabricación local, de acuerdo con la Declaración de Roma, adoptada en la Cumbre Mundial de la Salud del viernes, durante la cual Von der Leyen dijo que la UE planea desarrollar una serie de centros de producción regionales en África.
