La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, dijo que se siente motivada por el progreso en la inflación. Los precios de la energía y los problemas de la cadena de suministro están a la baja en todo el mundo y el mercado laboral de EE.UU. se mantiene fuerte.
“Observamos que los problemas de la cadena de suministro se mitigan de manera significativa, los inventarios están mejorando y los costos de envío se han reducido”, dijo Yellen a periodistas después de visitar un centro de salud comunitario en Lusaka, la capital de Zambia. “Y esa parte de la inflación ya no contribuye de manera muy significativa”.
Varias medidas de inflación han mostrado señales alentadoras en las últimas semanas, incluidas las caídas en el índice de precios al consumidor, que bajó a 6,5% en el año hasta diciembre, desde su máximo de 9% en junio. Los precios al productor también han disminuido más rápido de lo previsto.
En respuesta, los bonos del Tesoro han surgido. Los inversionistas apuestan que la Reserva Federal dejará de elevar las tasas y comenzará a reducir los costos de endeudamiento antes de lo que actualmente proyectan las autoridades de política monetaria.
Yellen también comentó que los precios de los productos bajaron a fines de 2022 y que anticipaba que la inflación de la vivienda —un contribuyente particularmente fuerte a las presiones de precios en el segundo semestre del año—, se enfriaría hacia mediados de 2023.
“Durante los próximos seis meses, eso debería dejar de impulsar en gran medida la inflación estadounidense”, dijo. “Creo que en EE.UU. seguimos ante un mercado laboral fuerte y un progreso en la inflación. Y esas son señales muy útiles”.
Yellen se encuentra en un viaje de tres escalas por África destinado a impulsar los lazos de EE.UU. con el continente.
