Las solicitudes de seguro por desempleo en Estados Unidos cayeron por primera vez en tres semanas, lo que sugiere que la demanda laboral se mantiene saludable.
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Las solicitudes iniciales de beneficios por desempleo disminuyeron en 2.000 a 250.000 en la semana que finalizó el 13 de agosto, según datos del Departamento del Trabajo publicados el jueves. La fecha es particularmente relevante porque corresponde con el período de referencia del informe de empleo de agosto del Gobierno, que se publicará a principios del próximo mes.
La estimación media de los economistas encuestados por Bloomberg apuntaba a 264.000 solicitudes.
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Las solicitudes continuas de beneficios estatales subieron a 1,44 millones en la semana que finalizó el 6 de agosto.
La caída en las solicitudes de beneficios apunta a una demanda laboral aún saludable, ya que las empresas intentan atraer y retener empleados en medio de una persistente escasez de trabajadores. Sin embargo, varios empleadores han despedido personal o puesto en pausa las contrataciones en medio de la incertidumbre económica, lo que podría continuar mientras la Reserva Federal sigue un camino agresivo de alzas de tasas de interés.