Starbucks, que ya puso en marcha un proceso de reestructuración en Estados Unidos, hará lo propio en Europa.
La mayor firma de café del mundo reducirá sus operaciones europeas y otorgará a su socio latinoamericano los derechos para abrir y administrar cafés en cuatro nuevos países. En virtud del acuerdo de licencia Alsea, de Ciudad de México, expandirá la marca Starbucks en Francia, Holanda, Bélgica y Luxemburgo, donde su presencia es relativamente limitada en comparación con mercados vecinos como el Reino Unido.
La alianza con Alsea en Europa le significará menos distracciones al director ejecutivo de Starbucks, Kevin Johnson, en momentos en que se centra en revertir el estancamiento de las ventas en sus dos mercados más importantes, EE.UU. y China. La compañía declinó revelar detalles financieros de la transacción.
"Al reunir a Francia, Holanda, Bélgica y Luxemburgo bajo el alero de Alsea, desbloqueamos un potencial de crecimiento sin explotar para garantizar el éxito a largo plazo en la región", comentó a través de correo electrónico la vocera de Starbucks Haley Dr0age.
Desvinculaciones
Además de ampliar su alianza con Alsea, Starbucks cerrará un centro de soporte en Ámsterdam y despedirá a casi todos los 190 trabajadores de esa ciudad. Cuatro de ellos pasarán a la planta de tostado de la compañía en la capital holandesa, que emplea a unas 80 personas. Asimismo, la empresa reestructura su oficina en Londres.
La cadena busca optimizar sus operaciones en todo el mundo al tiempo que disminuye la demanda de sus famosos Frappuccinos y los clientes, que una vez consideraron a la empresa de gran categoría, optan por consumir cafés de mayor calidad. Del mismo modo, el panorama cafetero en Europa también se vuelve más competitivo, en particular luego de que Coca-Cola acordara comprar la cadena británica Costa por US$5.100 millones.
Interés de inversor activista
En tanto aumentan los desafíos, la compañía atrajo el interés de un importante nuevo accionista: el inversionista multimillonario Bill Ackman, quien anunció este mes la adquisición de una participación en la empresa valuada en US$900 millones. Ackman considera que la acciones de Starbucks pueden duplicarse con creces en los próximos tres años y destaca las oportunidades de la cadena en China.
La compañía de Seattle cuenta ahora con más de 28.000 tiendas en todo el mundo, lo que la convierte en una de las cadenas de restaurantes más grandes a nivel global. En Europa, Medio Oriente y África posee cerca de 500 locales y otorga licencias a otros 2.700. Con su gran presencia, la empresa quiere traspasar más responsabilidades a manos de socios como Alsea para gestionar un mayor crecimiento.
Starbucks contempla vender sus 83 locales en Francia y Holanda a Alsea, que se hará cargo de las operaciones, remodelaciones y trabajadores. La socia también administrará la cadena de oferta de las otras 179 tiendas que ya cuentan con licencia de otros operadores en esos cuatro países.