Pocos en Wall Street pensaban que Tim Cook podría llegar a igualar a Steve Jobs. Pues bien, nueve años después de que Jobs renunciara y dejara a Cook a la cabeza de Apple Inc., la compañía vale más que nunca, y Cook es más millonario que nunca.
El precio de las acciones de Apple subió casi 5% la semana pasada, dejando a la empresa —que Jobs cofundó hace 44 años en la casa de sus padres, en California— en la cúspide del hito bursátil: un valor de mercado de casi US$2 billones.
Cuando Jobs murió, estaba valorada en unos US$350.000 millones. Cook, mientras tanto, se ha unido a uno de los clubes más elitistas, el de directores ejecutivos que no han fundado las empresas que dirigen: su patrimonio neto eclipsó los US$1.000 millones, según cálculos del Índice de Multimillonarios de Bloomberg.
La estimación del patrimonio neto de Cook se basa en un análisis de documentos presentados a las autoridades regulatorias y en la aplicación del desempeño de mercado de un típico inversionista rico a sus ganancias por concepto de venta de acciones. Cook, de 59 años, dijo en 2015 que planea donar la mayor parte de su fortuna y que ya ha regalado acciones de Apple por un valor equivalente a millones de dólares. Su riqueza podría ser menor si ha realizado otras donaciones caritativas no reveladas.
Josh Rosenstock, portavoz de Apple, declinó hacer comentarios.
“Este ciclo tecnológico ha sido mucho más grande y más largo de lo que pensaba”, dijo Kanji de Hussein, socio de la firma de capital de riesgo Hoxton Ventures, quien expresó cautela sobre las perspectivas a largo plazo de Apple después de que Jobs dejara la empresa. “De todas esas acciones, Apple se ha convertido en la mayor máquina de generación de efectivo de la historia”.
Acciones FAANG
El valor de mercado de Apple y la riqueza de Cook reflejan el aumento de las acciones del grupo FAANG (Facebook, Amazon, Apple, Netflix y Google), acrónimo que ni siquiera existía en la era de Jobs. También llega en momentos en que Cook y sus homónimos de las otras grandes empresas tecnológicas —Jeff Bezos, de Amazon.com Inc.; Sundar Pichai, de Alphabet Inc.; y Mark Zuckerberg, de Facebook Inc.— enfrentan investigaciones antimonopolio sobre lo que sus críticos caracterizan como poderes monopolísticos.
Si bien Bezos y Zuckerberg tienen enormes participaciones en las empresas que fundaron, el camino de Cook hacia el club de las 10 cifras fue más gradual.
Cuando Jobs dimitió en agosto de 2011 y murió poco después, Cook ya había ocupado el cargo de director ejecutivo interino en varias ocasiones, pero tanto a inversionistas como a analistas les preocupaba que Apple no pudiera innovar tanto como lo había hecho antes.
Si bien, durante la última década, Apple no ha revelado un nuevo producto tan innovador como el iPhone, la compañía de todas maneras ha prosperado. Cook ha supervisado el desarrollo de dispositivos como el iPhone X y el Apple Watch, nuevos servicios como Apple Music e investigación sobre nuevas fronteras como vehículos autónomos y lentes de realidad aumentada.
Incluso la pandemia, que ha impactado a muchos otros sectores de la economía, ha beneficiado Apple y otras grandes empresas tecnológicas, ya que la gente se ha vuelto aún más dependiente de sus productos y servicios.