El Ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Ernesto Araujo, presentó una defensa inusual de los valores occidentales mientras defendía lazos más fuertes con el presidente Donald Trump durante un viaje a Washington, DC.
En su primer discurso público en Estados Unidos, el ministro criticó a los globalistas por apoyar la "ideología de género" y lanzar un debate sobre el cambio climático "sin pruebas científicas del calentamiento global" causado por la actividad humana. También dijo que "la justicia social es un pretexto para la dictadura" y comparó al presidente brasileño Jair Bolsonaro con Trump.
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"Trump y Bolsonaro son parte de la misma insurgencia, lo que yo llamaría la insurgencia universal contra la tontería", dijo Araujo en un evento de Heritage Foundation, un centro de estudios conservador con sede en Washington. El globalismo, dijo el ministro, es "la amalgama de la economía globalizada con el marxismo cultural infiltrado en las instituciones". El ministro pronunció sus palabras en inglés.
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Araujo se encuentra en Estados Unidos para reunirse con el secretario de Comercio, Wilbur Ross, y el secretario de Estado, Michael Pompeo, conforme Brasil y Estados Unidos inician negociaciones bilaterales para un acuerdo comercial. El presidente de la ultraderecha de Brasil, Bolsonaro, es un admirador de Trump, que ha alineado crecientemente su Gobierno con Estados Unidos en política exterior. También planea nombrar a su hijo Eduardo, diputado brasileño, para el cargo de embajador en Washington a pesar de las críticas internas y externas.
Trump ha apoyado la nominación de Eduardo y ha respaldado a Bolsonaro en una reciente disputa con el presidente francés, Emmanuel Macron, sobre los incendios en la selva amazónica.
Araujo reconoció que las exportaciones brasileñas podrían ser objeto de represalias por los los incendios debido a que los políticos y parte de la opinión pública en Europa han pedido sanciones para presionar a Bolsonaro. "Lamentablemente, el comercio puede ser víctima de la ideología", manifestó.
