En EE.UU., Brasil y México comenzaron a funcionar este año bancos de fibroblastos, que criopreservan estas células de la dermis para su posterior implante cuando la paciente lo requiera o lo necesite. Las células son guardadas en recipientes con nitrógeno líquido, como sucede con las muestras almacenadas en los bancos de células madre de cordón umbilical que están en Argentina. Aunque aún se desconoce cuántos meses pueden estar los fibroblastos criopreservados, la idea de guardar estas células como un seguro de juventud despierta muchas fantasías y también abre nuevas esperanzas entre quienes quieren vencer a toda costa el paso del tiempo.
De hecho, en el país ya hay proyectos para abrir a fines de este año un banco de estas características. Sin embargo, juega en contra el alto costo del procedimiento. En Brasil, la empresa TechLife ofrece únicamente el almacenamiento y cultivo de los fibroblastos por unos $ 25 mil, a lo que hay que sumarle los costos de recolección y aplicación.