Cuando se aproximan las elecciones de noviembre, las encuestas van marcando un creciente deterioro de las posibilidades de reelección para Donald Trump y el consecuente crecimiento a favor de su rival, el demócrata Joe Biden.
Esto ha provocado la ira del presidente norteamericano y sus consecuentes predicciones de fraude, tal y como las lanzara antes de su elección contra Hillary Clinton, en 2016. Entonces, la estrategia de manipular datos, promover la difusión de noticias falsas y proclamarse como la gran esperanza blanca le dio buenos resultados. Ahora vuelve sobre el punto, y sin información concreta que lo respalde aseguró días atrás que ésta es la elección “más corrupta en la historia” de los Estados Unidos. No es creíble, y es bueno recostarse en encuestas creíbles.
Esto vale también para el consumo interno de los argentinos. En su edición del domingo 19, PERFIL publicó un artículo firmado por Diego Reynoso, investigador del Conicet y director de la Encuesta de Satisfacción Pública y Opinión Pública, Espop (Universidad de San Andrés). La nota desarrolla los datos del reciente resultado de la Espop (para no abundar en el contenido, el lector podrá acceder a él en https://bit.ly/2ZYsvEu)
Es un estudio muy interesante y pormenorizado. Pero este diario no cumplió con una premisa incorporada a sus reglas de estilo: toda nota centrada en encuestas debe llevar en su texto, en un recuadro o al pie de infografías, los datos de la investigación: cantidad de casos, amplitud del campo, modalidad de contactos, etc., lo que se conoce como ficha técnica.
En el caso de lo publicado por El Observador, la ficha no está presente, y que su autor sea al mismo tiempo quien dirige la consultora no exime de la obligación editorial. Este ombudsman se comunicó con el editor de la sección, Santiago Farrell, quien explicó: “Es verdad que la nota carece de ficha técnica cuando debería haberla llevado por tratarse de un artículo basado en una encuesta, más allá de que lo haya escrito el director de la misma. Fue un error que solo puedo atribuir a un descuido vinculado a las dificultades de editar la sección a través del teletrabajo, lo que complica varios pasos del proceso”.
Para este ombudsman, es una explicación satisfactoria, porque las limitaciones que afectan el normal desenvolvimiento de la redacción hacen en PERFIL un campo propicio para este tipo de omisiones y errores.
Editorial. El lector Néstor Osvaldo Eduardo Calvo se refiere en su carta publicada este domingo 26 de julio al artículo de contratapa editado el domingo 19 por Jorge Fontevecchia (https://bit.ly/3f04Jw0). En unas cuantas ocasiones, este ombudsman ha comentado negativamente textos del editorialista, pero no será éste el caso: quiero dejar tranquilo al señor Calvo porque lo publicado en esa columna va en línea con lo que Fontevecchia ha manifestado públicamente, en este diario y por otros medios, exponiendo su postura clara acerca de la necesidad de ampliar la sustentación de los gobiernos para cerrar una grieta que afecta al país y su futuro. Pedí al autor del artículo una respuesta al lector y se manifestó en este mismo sentido.
Síntesis. Carlos Gabetta, un habitué en las páginas de opinión de este diario, se quejó por un “destacado” en su artículo “Somos como somos (bis)”, publicado el domingo 12 en la página 18. Tal recurso gráfico siempre es una síntesis de alguna idea expuesta en la nota, pero algunas veces, por razones de espacio, esa reducción modifica el sentido de lo expuesto, aunque fuere en mínima proporción. El celo de Gabetta parece exagerado en este caso, pero aquí está la aclaración reclamada por el columnista.