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Qué hacer con Macri

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Mauricio Macri en Jujuy. | Presidencia

Por estos días, la respuesta al título recorre no pocos despachos. Opositores, empresarios, banqueros, sindicalistas y hasta dirigentes oficialistas van y vienen con las conclusiones, cuando llegan a alguna, respecto del presente y el  futuro inmediato del presidente de la Nación.

Como viene sucediendo desde el “palazo” de las PASO, gran parte de las miradas al respecto se dirigen hacia Alberto Fernández. El candidato del FdT muñequea entre sus críticas ácidas hacia la gestión dentro de la competencia electoral y que las mismas no agraven la frágil gobernabilidad socioeconómica y financiera: lo más probable es que él mismo la herede.

Alberto F observa con intranquilidad ciertos pasos de Mauricio Macri, sobre todo ante las encuestas que maneja en la calle México. “¿Le estarán diciendo de verdad que la puede dar vuelta?, porque a veces actúa como si lo creyera”, dice entre irónico y preocupado el presidenciable, ante los casi 25 puntos que estima que está sacando de diferencia.

Por esta tensión, y un intercambio áspero antes de que Fernández iniciara su viaje a España, se cortaron los contactos telefónicos, que solo comenzaban por iniciativa de Macri. Ya volverán, especulan en las oficinas albertistas, donde desfila más gente que en un shopping dominical.

Por convencimiento, necesidad o conveniencia, el círculo rojo se le anima ahora a Macri como nunca. Para pegarle o ignorarlo (como hizo su ex cercano Juan Manuel Urtubey en Salta esta semana, por dar un caso), o para aprovecharse (como volvió a hacer el gastronómico Luis Barrionuevo, por citar otro ejemplo).

En el PRO ya hay quienes piensan en el posmacrismo, como única chance para mantenerse como principal oposición tras el posible triunfo de la fórmula Alberto-Cristina. Marcos Peña no es uno de ellos, obviamente. María Eugenia Vidal, Horacio Rodríguez Larreta, Rogelio Frigerio y Emilio Monzó son algunos de los que imaginan el porvenir sin Macri.

Como ya dijimos aquí, entre los oficialistas no se descarta el fantasma de que el Presidente deba hacer frente a citaciones judiciales complicadas, una vez que deje el poder. Lejos de despejar esas intrigas, en la calle México y sobre todo en el Instituto Patria azuzan: Comodoro Py ha dado muestras de saber adecuarse a los tiempos.