El 27 de enero es un día de memoria en el que todo el mundo recuerda a las víctimas del Holocausto, a los 6 millones de judíos asesinados por el régimen nazi.
Los sobrevivientes nos legaron sus dolorosos testimonios, cuya esencia encierra un desafío muy grande: que la humanidad aprenda a convivir en paz manteniendo el compromiso por la memoria de la Shoá. Esta debe ser nuestra misión, la del Estado y de la sociedad en su conjunto.
En diciembre pasado inauguramos el nuevo Museo del Holocausto de Buenos Aires junto a importantes referentes de los distintos colores políticos de nuestro país.
En ese acto resalté la importancia de que la memoria del Holocausto haya sido una verdadera política de Estado mantenida por todos los presidentes desde la recuperación de la democracia.
En ese sentido celebramos públicamente el viaje del actual presidente de la Nación, Alberto Fernández, y su decisión de participar en el Foro Mundial del Holocausto en Israel, en su primer viaje oficial al exterior. Su presencia allí ratifica la continuidad de esta política de Estado y consolida el compromiso democrático de la Argentina, demostrando que honrar a las víctimas del horror nazi está más allá del color político, importan la memoria colectiva y los derechos humanos.
*Presidente del Museo del Holocausto de Buenos Aires.
