Tiene 54 años, es licenciada en Administración de empresas gastronómicas y hoteleras. En su currículum figura ser una de las armadoras del tradicional Potrerillo de Larreta, en Alta Gracia. También trabajó en el desarrollo de negocios de Osde y Sancor seguros. En su pasado trabajó como gerente de hoteles en el valle de Chapelco en San Martín de Los Andes durante el invierno y en Estados Unidos en el verano. No paraba.
Su actual familia la componen Eduardo Copello, su pareja y sus tres hijos: Eduardo (22), Bautista (20) y Delfina (13).
Con menos de 30 votos, fue electa como la nueva intendenta de Mendiolaza. Terminará con 24 años de gobierno de Daniel Salibi. Fue una dura batalla, voto a voto para ser la nueva mandataria electa.
“Mira, la diferencia son 28 votos. Fueron los suficientes para poder ganar” afirma la candidata electa y próxima jefa del municipio. Reconoce que ya festejó en el escrutinio provisorio, aunque contaba con apenas 44 votos de diferencia.
Batalla voto a voto: en Mendiolaza se confirmó la victoria de Adela Arning
El actual intendente no fue un aliado y muchas veces, según Adela, “hizo lo imposible para que no sea candidata”. Su espacio contaba con encuestas que confirmaban la posibilidad de ganar, algo que confirmó el trabajo realizado durante más de cuatro años en la localidad. Desde antes de ser concejal, Arning, ya se había involucrado en la política local siendo representante de un incipiente centro vecinal “que no logramos mucho”, reconoce.
Aún no se comunicó con el gobernador electo Martín Llaryora, a quién sólo lo saludo en algún evento. Así mismo pedirá poder ingresar a Ente Metropolitano y “poder gestionar algunos de los beneficios para la ciudad”
El empleado y la transparencia, ejes de la nueva gestión
Sus primeros pasos dentro de la gestión será “hacer un diagnóstico del estado Municipal. Luego de 24 de una misma administración, que creció exponencialmente, que tiene unos 300 empleados que ingresaron por amistad y relaciones”.
Asegura que los municipales serán sus aliados, y para que brinden un mejor servicio buscará capacitarlos. “La gente merece una oportunidad, quizás no todos se puedan adecuar a la cultura pero tenemos que dar el desafío. Parte de lo que veo es que muchos trabajan con miedo, sin expectativas, sin liderazgo. Tenemos que transformar el recurso humano”, afirma Adela.
Otro de los desafíos que se plantea Arning es hacer atractiva la ciudad para el vecino y que la sienta propia. Para ello, según la futura mandataria, “tenemos el plan de crear un polo cultural y otro gastronómico que inviten a vivir nuevamente la ciudad. Muchos vivimos más en Villa Allende que en Mendiolaza”, asegura.
“Tenemos todo por hacer” es el leitmotiv de su futuro gobierno. Comenzando por “ordenar la administración y recuperar el arroyo que cruza la ciudad. Que sea controlable en la crecientes y disfrutable por la familias luego, no una zona oscura”.
“Tenemos un plan. Quizás no podamos terminar con todo”, sentencia Adela, que intentará darle aires de profesionalismo a su gestión, así como lo hizo en sus años a cargo de proyectos empresariales de los que formó parte transformándolos en íconos turísticos.