Un verdadero raid de intendentes peronistas se produjo en la semana que culminó. En sus manos llevaron carpetas con pedidos que en líneas generales fueron similares: auxilio económico para hacer frente a las obligaciones municipales, en primer lugar; y fondos para completar obra pública jaqueada por los vaivenes económicos y el aumento del dólar. Si bien algunos dirigentes del PJ provincial se mostraron molestos por lo que consideran un salto por sobre la figura de Schiaretti, desde El Panal no opinan lo mismo.
Fuentes cercanas al gobernador califican como un acercamiento a Nación esta serie de encuentros que se dieron en los últimos días y consideran que es el paso previo a la mentada reunión entre el presidente Alberto Fernández y Juan Schiaretti. En los últimos días fueron varias las fotos que llegaron desde Capital Federal y todas con esta misma tónica: dirigentes nacionales junto a intendentes peronistas. Una de las imágenes que generó mayor ruido fue la del ministro del Interior, Wado de Pedro, con el intendente de Río Cuarto, Juan Manuel Llamosas en el despacho del primero. Pero no fue la única. En otro sector de la Casa Rosada el secretario General de la Presidencia Julio Vitobello y el secretario de Obras Públicas Martín Gill recibieron a intendentes de los departamentos Juárez Celman, Unión y Santa María. Por otro lado, cada intendente pudo tomar contacto con ministros de otras áreas de Nación y avanzar en otras problemáticas. Fabián Guaschino, intendente de La Carlota se reunió con Ginés González García. En sus redes sociales dejó reflejado los contenidos del encuentro. “Estuve reunido junto a otros intendentes con el Ministro de Salud de la Nación, @ginesggarcia quien nos comentó que se va a recuperar el programa Remediar y se agrega nuevamente la vacuna contra el meningococo retirada del calendario hace unos años. Se trabajará con los municipios y la provincia en estrategias para la radicación de médicos en el interior”, contó el intendente.
Una fuente de primera línea de Nación destacó esta serie de encuentros que tuvieron lugar en la semana. “No hay una decisión de no trabajar con Córdoba. Nación quiere hilvanar una relación institucional primero, la cual puede transformarse en el germen para una relación política fructífera. Pero ambas partes tienen que mostrar hechos, como una especie de primer round en que cada parte muestra lo que tiene”, expresaron con términos boxísticos. “De manera pública, hablan de que se va a trabajar en conjunto, pero hay acciones que deben mostrarse antes de dar un paso más en esta relación. Hay una cuestión real de que prácticamente todos los intendentes peronistas trabajaron para que Alberto Fernández fuera presidente. A través de los ministerios se da un ámbito de diálogo que no se venía dando en otra etapa”, precisan. Además, le ponen nombre y apellido a la persona que tiene la llave para generar un acercamiento definitivo entre las partes: Wado de Pedro.
Desembarcos nacionales.
En esta línea de gestos previos a la esperada foto entre el presidente y el gobernador, el próximo jueves habrá arribos importantes por parte de funcionarios nacionales. Se trata del Ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, y de Wado de Pedro, quienes llegarán a la provincia para firmar convenios vinculados a la tarjeta social
Halcones y palomas.
Desde Provincia, el pensamiento es similar en casi todos los puntos. Entienden a los intendentes que, acorralados por sus necesidades, buscan fondos frescos en Buenos Aires y también consideran que es el paso previo a un acercamiento entre los máximos referentes de Nación y Provincia. Sin embargo, consideran que hay dos posturas por parte de los referentes cordobeses en el albertismo. Por un lado, la de Gill, mucho más amable y con tendencia al diálogo, y otra más dura como es la del senador Carlos Caserio, quien también se reunió con intendentes cordobeses en Buenos Aires. A diferencia de Gill, Caserio es mirado con recelo, principalmente con la mira puesta en el 2023 y la posibilidad de un armado propio en estas tierras.