Millonario, ex empresario, conferencista inspiracional, misionero en las villas durante su juventud y, hoy, uno de los hombres con mayor poder en el team de Mauricio Macri. Este es el perfil de Mario Quintana, el vicejefe de Gabinete a cuyo cargo reportan las carteras de Desarrollo Social, Trabajo, Cultura, Ciencia, Anses, Modernización, Medios, Hacienda, Finanzas, Educación y Cancillería.
“Si Peña es el coordinador general, Quintana es junto a (Gustavo) Lopetegui, los ojos y los oídos del Presidente”, aseguran quienes conocen de cerca el reparto de poder en la Casa Rosada.
A su paso por Córdoba, en la inauguración del Ciclo de Coyuntura 2018 de la Bolsa de Comercio, Quintana ofreció ante los empresarios una matrix de la visión social del Gobierno nacional que, en pocas oportunidades, se escuchó con tanta claridad de voz del propio Macri.
“No creemos en la teoría del derrame”, aseguró poniendo explícita distancia respecto del neoliberalismo de los ´90, y agregó “dentro de lo que es nuestra visión de promover el cuidado de la gente hacemos política de ingresos, aunque tenemos en claro que la política de ingresos auxilia en la indigencia pero no saca a la gente de la pobreza e incluso, a veces, corre el riesgo de clientizarse”, enfatizó dejando en claro, también, sus diferencias con el populismo asistencial.
Según Quintana, medidas como el fortalecimiento de las políticas de ayuda social y de reparación histórica para los jubilados fueron necesarias para construir un sistema de confianza con la sociedad. Pero, de aquí en más los desafíos del Gobierno pasan por “la calidad de los bienes públicos, la sustentabilidad de la oferta de trabajo y el garantizar las condiciones para generar movilidad social”, tres factores en los que enfocó “la dinámica genuina para superar la pobreza”, juntos con “el combate al narcotráfico y el cuidado del medio ambiente”.
Erradicación de villas. Quintana monitoreó de cerca una de los principales políticas que Desarrollo Social puso en marcha: el Registro Nacional de Barrios Populares, un relevamiento de 4.228 polígonos de asentamientos, en todo el país, que se realizó con la colaboración de organizaciones como Techo, Cáritas, Barrios de Pie, Corriente Clasista y Combativa y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP).
Según detalló Quintana, el estudio reveló que en estas villas existen unas 800.000 viviendas, viven cuatro millones de personas, de las cuales el 70% tiene menos de 30 años y la informalidad como única salida laboral.
El funcionario anunció que a partir de junio, las personas identificadas en el relevamiento recibirán un “certificado de vivienda familiar”, entregado por Anses. “Aunque no tiene valor en términos de título de propiedad, porque no implica un reconocimiento catastral, servirá para que estas personas realicen trámites sociales, en los ministerios y para la regularización de los servicios”, explicó Quintana.
La tierras en cuestión serán expropiadas para detener los desalojos y “el próximo paso será la integración urbana” con viviendas sobre cuyo desarrollo podrán tener injerencia los interesados para evitar “las casas caras y corruptas del pasado”, dijo Quintana. De hecho, el funcionario aprovechó su estancia en la provincia para conocer una experiencia de construcción alternativa que gestiona el padre Mariano Oberlín. (Ver abajo)
“Súper Mario”. Entre los hombres de negocios de Buenos Aires, que suelen compartir encuentros con Quintana y conocen también de primera mano su fuerte carácter, influencia y disputas dentro del gabinete, lo apodan "Súper Mario" (por el personaje del videojuego Súper Mario Bros).
En el comienzo de su carrera, pasó por Siemens y McKinsey, logró su MBA en Francia y cuando regresó creó uno de los formatos de retail más innovadores de las últimas décadas (Farmacity). Aseguran que es “guerrero como todos los emprendedores”, pero a la vez un seguidor confeso de las enseñanzas de Jesús, Buda, San Francisco de Asís y un líder místico indio llamado Swami Vivekananda. Esta mixtura intelectual-espiritual lo convirtió en el “puente” más sólido de comunicación entre el presidente Macri y Elisa Carrió, lo cual le adjudica una dosis adicional de poder.
"Súper Mario" aseguró ante los empresarios cordobeses que no tiene ninguna intención de volcarse de lleno a la política, buscando un cargo electivo. Dijo estar contento y satisfecho de servir al equipo de Macri. No obstante, antes de fin de año se desprenderá de las últimas acciones que le quedan en Farmacity.
“NOA TENIA EXPECTATIVAS, PERO SURGIERON COINCIDENCIAS”
Mario Quintana terminó de disertar en la Bolsa de Comercio e inmediatamente el padre Mariano Oberlin lo pasó a buscar en su automóvil particular para recorrer barrio Muller, donde desarrolla una intensa actividad social.
Uno de esos proyectos ya alcanzó un buen nivel de visibilidad. Se trata de un método de construcción alternativa (con botellas de plástico) para construir casas. “Soy muy crítico de este Gobierno en algunos aspectos, como con el tema de las tarifas. No tenía demasiadas expectativas con la reunión”, le dijo Oberlin a PERFIL CORDOBA.
Sin embargo, reconoció que se llevó una sorpresa: “Quintana me contó de sus orígenes humildes y además tenemos amigos en común entre sacerdotes tercermundistas, por lo que hubo buena sintonía”. El religioso añadió que a Quintana le impresionó la técnica que utilizan para construir casas. “Veremos qué se puede articular con la Nación. El gobierno está trabajando en el tema de las villas y ahora surge alguna expectativa para lograr una mayor integración en los barrios carenciados, ya que pretenden que muchas de las medidas a adoptar tengan el aval del Congreso”, agregó Oberlin