"Se está perdiendo la batalla", advierten desde la Facultad de Medicina de La Plata
"Hay que insistir en que el aislamiento ha salvado miles de vidas en Argentina y el mundo. Los trabajadores de la salud no podemos derrotar solos la pandemia", dicen.
fac de medicina de La Plata. |
CEDOC
"El colapso del sistema sanitario está cercano. Los recursos para tratar a los pacientes con coronavirus se están agotando. La mayoría de los hospitales, y en especial las Unidades de Terapia Intensiva del país se encuentran con un altísimo nivel de ocupación de camas”, así relatan su preocupación en una carta abierta los profesores y el cuerpo que integra la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP)
“Sentimos que los médicos, enfermeros, kinesiólogos y todos los integrantes del equipo de salud están perdiendo la batalla contra la pandemia”, aseguran. Firmada por Arnaldo Dubin y Judith Bernstein, la facultad pidió a la sociedad responsabilidad individual para mantener el aislamiento. “En el contexto dramático de una de las crisis sanitarias más graves de la historia argentina, los profesores de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La Plata expresamos nuestra más extrema preocupación por la situación actual", dicen.
Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
“El personal sanitario y el sistema de salud están al borde del colapso. Y, si esto ocurre, puede repetirse el escenario que vimos en otros países. Debemos insistir en explicarle a la población que el aislamiento ha salvado miles de vidas en nuestro país y el mundo. Los trabajadores de la salud no podemos derrotar solos la pandemia. Necesitamos la ayuda del conjunto de la sociedad", escribieron.
“Nuestra mayor angustia, sin embargo, es el recurso humano”, defendieron la labor de colegas y profesionales de la salud. “La situación en la que se encuentra el personal sanitario que, a diferencia de las camas y los respiradores, no puede multiplicarse. Los intensivistas, en particular, que ya eran pocos antes de la pandemia, hoy se hallan al límite de sus fuerzas”, aseguran en la carta.
“Están raleados por la enfermedad, exhaustos física y anímicamente, por el trabajo continuo e intenso, atendiendo a cada vez más pacientes”. Alertan que “el personal sanitario necesita más de un trabajo para vivir y los sueldos están muy lejos de la remuneración por la enorme dedicación y responsabilidad que su tarea merecen. Pese a todos estos problemas, siguen adelante con un compromiso irrenunciable”.
Y llaman a la reflexión sobre la conducta individual de quienes incumplen con las medidas de aislamiento y cuidado: “Parece haber dos realidades. Una es la de los hospitales con la lucha brutal y desigual contra la enfermedad y la muerte. Otra, la de las calles y plazas, con cada vez más gente que quiere disfrutar, que reclama sus derechos, la gente que se siente bien por ahora, que no guarda la distancia y no se protege”, advierten.
“Los trabajadores de la salud solos no podemos derrotar a la pandemia: necesitamos de la ayuda del conjunto de toda la sociedad”, piden.
