La casa que perteneció a Sarmiento es sede institucional de la provincia y está enfocada en representar a los sanjuaninos en Buenos Aires y proponer iniciativas vinculadas a la tierra cuyana. Contribuye a la difusión de la vida y obra de Domingo Faustino Sarmiento, quien vivió en la casa entre 1875 y 1888.
Con su aire señorial y nostálgico, la Casa de San Juan de Calle Sarmiento 1251, Ciudad de Buenos Aires, es un Monumento Histórico Nacional ya que allí vivió Domingo Faustino Sarmiento,hoy es un espacio donde se busca apoyar y contener a los sanjuaninos en distintos ámbitos.Es posible comunicarse a través del 011 4382-5580 y cordinar una visita.
La Casa de San Juan promueve la integración, el intercambio, el bienestar, el desarrollo de los sanjuaninos y su identidad cultural.
“Hemos sumado actividades y vamos a agilizar y mejorar cada área y cada servicio”, dijo Juan Cruz Dávila, director de la Casa de San Juan, desde marzo de este año. Quienes transitan la estancia de calle Sarmiento 1251, pleno microcentro porteño, afirman que los últimos meses la Casa se ha visto revolucionada con una nueva impronta.
Dávila explicó que la Casa de San Juan representa todas las áreas de gobierno de la provincia y que existe un especial cuidado en la asistencia a quienes viajan por temas de salud a Buenos Aires.
Turismo, oportunidades comerciales y más
Este año, un importante trabajo en conjunto de la Casa con el Ministerio de Turismo y Cultura de San Juan, logró que se sume como un punto de información turística para promocionar las bellezas naturales de la provincia y sus actividades para fomentar el turismo en la provincia.
El 8 de septiembre se firmó un acuerdo de colaboración entre la Casa de San Juan y la Dirección General de Programas de Cooperación Federal, que depende de la Subsecretaría de Gobierno del Ministerio de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Forma parte del circuito “Conociendo Buenos Aires”, abriendo los días lunes en dos turnos,por la mañana a las 10:30hs y en la tarde a las 16hs
Es una oportunidad de oro para que un público diverso conozca más sobre la Provincia de San Juan y su oferta turística, cultural, social y productiva.
La Casa es considerada un punto de promoción de todos los productos y servicios sanjuaninos, es por eso que allí se realizan rondas de negocios a través del Ministerio de Producción, catas de vino y de aceite de oliva, se dan charlas sobre las ventajas para inversionistas, rondas de turismo, exposición de obras de arte sanjuaninas, etc.
La gestión, presente
“El gobernador de San Juan, Sergio Uñac, busca que la Casa abrace y reciba a todos los sanjuaninos que transiten o residan en Buenos Aires y que esté disponible para el sanjuanino que quiera exponer lo que realiza, ya sea un emprendimiento empresarial, social o artístico”, destacó el director.
Hizo referencia a la administración de los recursos “imitamos la gestión de Uñac y usamos los recursos con racionalidad, buscando siempre el equilibrio de las cuentas que nos permita prestar más y mejores servicios”.
El edificio cuenta con una oficina que funciona como despacho del gobernador en Buenos Aires, es punto de encuentro de ministros y funcionarios para su logística en CABA y lugar donde realizan sus reuniones.
Diversas áreas de gobierno interactúan en la Casa de San Juan, como los ministerios de Desarrollo Humano, de Infraestructura, de Turismo y Cultura, de Producción y dependencias específicas como la Obra social provincial y el Registro Civil, ambas con delegaciones en la casa de la calle Sarmiento.
En estos días, se inicia un nuevo programa llamado “La Casa cerca tuyo” en la que se propician reuniones con los ministros de Desarrollo Humano, Salud y el titular de Obra Social Provincia, para mantener contacto cercano con los derivados desde San Juan.
Historia de la Casa
Una historia muy rica es la que sigue contando la Casa de San Juan. Luego de su presidencia (1868 -1874), Sarmiento compró esta vivienda de más de doscientos años que había pertenecido a una familia entrerriana. Allí vivió hasta 1888, año en el que se marchó a Paraguay, donde fallecería.
Después de la muerte de Sarmiento, la residencia fue vendida. Posteriormente, entre 1910 y 1930, funcionó en sus instalaciones una escuela.Estuvo a punto de ser demolida en el año 1947, pero fue salvada al ser adquirida por el Estado Nacional, y al año siguiente fue declarada Monumento Histórico Nacional. Luego, cedida a la Provincia de San Juan. Muchos años después comenzó a funcionar como Casa-Museo.
Las guías de la Casa conocen todos sus secretos. Cuentan que Sarmiento no quiso modificar nada. También, que las mamparas que se abrían y cerraban generaban una ampliación del salón que con ese simple movimiento lograba que se adapte a las múltiples reuniones que el sanjuanino realizaba con personalidades de la época, dirigentes y pensadores.
La construcción es de estilo neoclásico italiano con patios interiores, parras, galerías, un aljibe, un enorme zaguán con habitaciones que la rodean y un gran patio donde Sarmiento disfrutaba largas horas de lectura y escritura.Se trata de una casa “larga”, con tres patios alrededor de los cuales se disponen las habitaciones.
El primer patio, hasta donde ingresaba la carroza, se mantiene prácticamente como lucía en sus mejores años: embaldosado en damero blanco y negro, a imitación de los templos masónicos, que, si bien fue restaurado, mantiene las aberturas originales.
El segundo patio es donde se encuentra la hermosa pajarera, el aljibe y la galería. El tercer patio tiene parras sanjuaninas y un retoño de la famosa higuera de Doña Paula en San Juan. Allí Sarmiento compartía mistela sanjuanina y un dulce casero con sus visitas.
